Evadir la responsabilidad es la nueva cultura. En un reportaje de Ultimas Noticias titulado “¿La abstención deslegitima? Una mirada sobre este hecho en el mundo” https://ultimasnoticias.com.ve/noticias/author/jinojosa/ Jesús Inojosa nos trata de convencer con argumentos comparativos y técnicos que la abstención no deslegitima, en este caso, al gobierno de Maduro. No lo vamos a comentar con detalles. Más atrás, el presidente, que votaba en la Escuela Miguel Antonio Caro, en Catia, cambia su sitio de votación para la Escuela Ecológica Simón Rodríguez, ubicada en Fuerte Tiuna. Son dos hechos asociados a la cultura de la evasión, pero así como estos dos casos hay muchísimos por todos lados.
Lo de Últimas Noticias, claramente en apoyo a los resultados y a la legitimidad del gobierno, lo abordamos de la siguiente manera: después de haber entusiasmado a más de la mitad de la población venezolana en una revolución llamada socialista, identificada con el socialismo, con fuertes señales de cambios en esa dirección, una merma en ese fervor de casi el 40 o 50 % es una señal para que el gobierno cambie, o se retire. Lo que antes fue legítima autoridad apoyada por el 70% de la población, hoy no lo es, porque estas elecciones sirvieron de plebiscito aprobatorio del gobierno. La legitimidad no se trata de un problema técnico legal, sino político y moral.
La gente le envía un mensaje claro a sus supuestos líderes: ¡esto no funciona! Ahora, el que no quiera ver ésto es otra cosa, “el que tenga ojos que vea” –diría Chávez –. Cuando disimulan la contundencia de esta realidad, insistiendo en razones técnicas o declarando eufóricos una victoria “política” (que no lo es), están despreciando la opinión del 69 % de la población del país; como quien dice “les sabe a mierda” lo que la gente piense y opine de ellos, les basta con que un pírrico 16 por ciento les legalice los resultados. En este caso no se trata de una “honrosa derrota”, sino de una vergonzosa mentira.
Otra cosa es la posición política y parcial de la UE y de EEUU en este asunto. El que la UE cuestione los resultados de Venezuela y no otros resultados similares, por las razones que sean, incluyendo la poca participación, no justifica que volteemos la mirada hacia el otro lado de esta realidad. Lo inteligente y lo justo es que pensemos sobre ese hecho de manera profunda, analítica, política, y no evadirlo, “hacernos los pendejos”, como si salvar a este país del desastre no fuera un problema urgente y serio.
El caso del cambio del centro de votación del presidente y su esposa. ¿No será que evitó los abucheos? Maduro no puede declarar que sabía de una atentado a su persona ese día porque es ridículo; aun siendo verdad, lo ha debido callar, porque nadie lo cree (quizás ese 16% del PSUV, leales y asustadizos, que votaron por ellos). ¡Ni Fidel tuvo tantas amenazas de muerte como Maduro dice que ha tenido en 8 años!, debe ser un récord.
Sin embargo lo curioso es, en tiempos de revolución, que nunca antes EEUU había manipulado a su antojo al gobierno como lo hace ahora con el de Maduro. Por ejemplo, Chevron y Schlumberger funcionan en Venezuela hasta que lo decidan en el norte, Maduro no puede con eso. Igual pasa con las importaciones de alimentos, que surten los abastos de la clase media-alta y alta, y los bodegones; desde lejos manipulan al gobierno y a la sociedad, como en una guerra cualquiera. Allá arriba deciden qué entra y qué no entra a Venezuela. ¿Qué necesidad tienen de “eliminar” a Maduro? ¡Es más útil así, como y donde está!… Pero ¡Duque!, ¡¿por qué o para qué?! (Yo no le veo el sentido). Maduro es un aliado inconsciente, psicológico, de sus enemigos del norte porque está ansioso de que lo acepten, lo cual lo convierte en un presidente manipulable. Como dicen: “debes conocer a tu enemigo”, ¡y a él lo conocen!; es un enemigo de “bajo costo”; con él vivo no se corren muchos riesgos.
Al perder el apoyo popular, Estados Unidos puede tomar medidas más drásticas con el gobierno de Maduro, pero no lo va asesinar. Por eso decimos que esa declaración del atentado es otra tontería irresponsable. Si lo que temían era una vergüenza de gente abucheando al presidente o la ausencia de gente en ese centro, peor fueron los resultados electorales, donde la población les dio duro con el “látigo de la indiferencia”.
Juan Carlos Alvarado, un vocero de COPEI declara hoy jueves 10 en TV, que el gran derrotado no fueron ellos (COPEI, PSUV; PCV; ETC.) sino el pueblo, como si los que no votaron son más idiotas que aquellos que sí votaron, además, alegando, como petulantes que son, que sus candidatos fue una gran oferta electoral para resolver los problemas del país. Otro negador irresponsable; otros negadores que no asumen su realidad, falta de ideas y de propuestas distintas al discursito neoliberal.
Un país donde los que fungen de líderes son incapaces de sentarse a pensar, con método, con sentido crítico la desconexión que tienen con los verdaderos problemas de la gente (no con los que ellos creen que son esos problemas), o con la gente misma, y con la realidad de sus propias vidas de profesionales de la demagogia (no reconocen sus mentiras jamás), no cuenta con una salida decorosa; sin que lleguen del norte a decirnos cómo tenemos que vivir y hacer las cosas. Seremos de nuevo una colonia tutorada por Europa y Estados Unidos, y estaremos en medio de una guerra comercial y hegemónica a nivel internacional.
Perdimos todos y parece que nadie lo sabe. Unos se hacen los pendejos y otros lo sospechamos desde hace 8 años. Ahora no hay excusas, o salimos a la calle, o debatimos, pensamos, reclamamos que paguen sus promesas, que cumplan con Chávez y con el país, o buscamos cómo escapar de este “cementerio banco”.
¡VOLVAMOS A CHÁVEZ!! ¡RESCATEMOS EL PLAN DE LA PATRIA, EL ORIGINAL DE CHÁVEZ!