La salida más honrosa para el madurismo es admitir sus errores, ceder el espacio a una junta de gobierno que restaure lo deshecho, incluyendo el peso de las instituciones, de la constitución y las leyes. No pueden seguir dando patadas de ahogados. La extradición de Saab, las acusaciones de “Delfín de la CIA” de Carreño a Figueroa, la inhabilitación de Eduardo Samán para ser candidato en Caracas, la investigación y acusación tardía del fiscal a Guaidó, por lo de la confiscación de Monómeros, son patadas desesperadas de ahogados. La salida más digna es reconocer los errores, y, así sea la única vez, por lo menos una vez…, hablar con la verdad.
El programa de Diosdado ha servido de comisariato ejecutor de las líneas del PSUV y el gobierno y un manipulador de crisis interna, dirigidas a los medrosos aliados de Maduro y el madurismo. Por un lado los distrae DE temas como el de la extradición Saab a EEUU, o de la inhabilitación de Samán, o la acusación insólita de Carreño contra Figuera, hablando de Colombia y de las nefastas elecciones (“nos quieren quitar el derecho a votar”, dice el hipócrita ) y por el otro los amenaza con un largo discurso sobre la traición, los asusta, amenaza con el estigma del traidor sin dar muchas explicaciones –diciendo que las traiciones van acompañadas de ambiciones y miserias, ¡como si nada de esto tuviera que ver con ellos!, o, “aquellos que han traicionado el proyecto país”, “como si esto tampoco tuviera que ver con él y con ellos, es decir, los maduristas disfrazados de chavistas! –. Solo para aquellos que ven con el Mazo dando ¿Por qué Diosdado nunca habla a fondo de ese “proyecto país”? ¿Por qué no habla de la Zonas Económicas Especiales, de la reinstalación de los Casinos, de las Leyes entreguistas, de la red de bodegones, de cómo ahora, con bloqueo o sin él, los ricos son más ricos y los pobres más pobres?
En este último programa (357) Diosdado se atrevió colocar un video viejo de Chávez (creo que del 2002 o antes), pero antes nos dice que Chávez siempre fue el mismo, y para demostrarlo usa el viejo discurso del comandante donde habla del “reformismo” vinculado a dos ideas, una la de Darwin sobre la evolución, el “pasito a pasito”, como lo llama ahí, y otra a Marx, hablando del “gran salto”. No se cómo lo hizo pero el video hace ver como si Chávez siempre estuvo de acuerdo con el “pasito a pasito” de la evolución de Darwin y no con el “gran salto” de Marx, llamando “reformistas” a aquellos que queremos dar el gran salto, no se sabe de dónde lo sacó, qué genio lo encontró; inclusive, siendo auténtico el video, este no representa el último pensamiento de Chávez respecto a ese tema. Así como ese, hay muchísimos más videos donde Chávez condena y alerta sobre el “reformismo”, un reformismo relacionado precisamente con lo que ellos están haciendo ahora; solo hagan la búsqueda por YouTube o Google y verán. Diosdado es el manipulador de la crisis interna, el amedrentador, el apaga fuego dentro de su gente.
La cosa debe estar fea. Para que Diosdado haya llegado a estos niveles como distractor y niveles de manipulación, porque lo que esconden les está haciendo daño: el caso Alex Saab, el caso Samán y la explosión nazi-fascista de Carreño en contra de Figuera. Diosdado no es un ideólogo, es un capitán con capacidad de arengar y manipular, tampoco sabe de economía o de filosofía, pero si sabe aprovecharse de una y la otra, usarlas a su favor, como eso de hablar de “proyecto país”, sin dar muchas explicaciones, y de colocar el “reformismo” justo sobre las prácticas políticas contrarias a él, llamar a Marx “reformista” (!!!) –lo mismo quiso hacer Maduro con su prólogo al Libro Azul, editado por Jorge Rodríguez en Ciudad Ccs., donde descalifica a Marx comparándolo con Simón Rodríguez, con el cuento de “lo nuestro americano”, para justificar a su “nuevo modelo económico” pro capitalista –, ¡como si Chávez no hubiera cambiado nunca! Esto fue lo que dijo y quiso demostrar Diosdado con su viejo video, en su programa 357.
¿Por qué no educa a sus fieles con el discurso de Chávez del Jardín Botánico del 2009? No lo puede hacer, porque el mismo Chávez los mandaría al carajo con su famoso “proyecto país”, falsificación del Plan de la Patria, el Plan de la patria “actualizado”, como llamó una vez Sanguino a ese fraude, el de Maduro; un vulgar reformismo, ¡peor aún!, ¡un descarado giro de 180 grados hacia el capitalismo más salvaje y colonial que existe en la región y quizás en el planeta!
Según Diosdado, reformistas somos los queremos hacer una revolución socialista verdadera, marxista, “direccionada hacia una radical supresión de la lógica del capital”, para decirlo con palabras de Chávez del 2012, las que fueron mutiladas del plan original en el 2013 por madurismo.
¡Por supuesto que Chávez cambió!, o para ser más preciso, ¡dentro de su visión de la revolución, Chávez evolucionó! Los que se quedaron pegados al pasado, a sus apetencias básicas, a la miseria y la ambición fueron ellos, incapaces de luchar “contra un mar de adversidades” –Parafraseando al gran poeta –, como lo hizo Chávez hasta que lo mataron.
Chávez: “asumo el marxismo”… «Es la teoría más avanzada en la interpretación científica de la historia, de la realidad concreta de los pueblos y la más avanzada propuesta hacia el mundo que Cristo vino a anunciar hace más de 2000 años: el reino de la igualdad, la paz y el amor», Presentación de Memoria y Cuenta correspondiente a la gestión de 2009, 16 de enero 2010