El que fue uno de los hombres de confianza del expresidente Hugo Chávez, desvirtuó la denuncia realizada por el actual ministro de petróleo de Venezuela quien lo denunció ante la fiscalía por el delito de corrupción. “Quiero decir que estas acusaciones provienen de un personaje, el Tarek El Aisami que no está cuestionado solamente en el país sino a nivel internacional. Una persona que está acusada de graves delitos en la justicia internacional, incluyendo narcotráfico y que está sancionado, su cabeza tiene precio. Es decir que es una persona que con estos antecedentes pierde cualquier legitimidad para levantar una denuncia en mi contra”.
Ramírez asegura que no es coincidencia que las denuncias en su contra fueran realizadas justo después de que anunciara su aspiración a la presidencia de Venezuela. “Primero fue Diosdado Cabello, ahora es Tarek El Aisami, y pronto vendrá el jefe del circo a decir cualquier cosa en mi contra”.
También se refirió al posible saqueo de recursos del estado provenientes de las arcas de petróleo y en las que, según él, estarían implicados algunos familiares de la vicepresidenta Cilia Flores. “Salí de la empresa en agosto de 2014 y lo primero que hizo el ‘madurismo’ para controlar la industria fue colocar a Erik Malpica que es el sobrino de Cilia Flores como vicepresidente de Finanzas, después pusieron a los acólitos de Maduro en la junta directiva. Vaciaron todos los fondos de PDVSA, los fondos de los trabajadores, los fondos de los jubilados dejaron las áreas operacionales sin recursos”, aseguró Ramírez.
