En la portada del Especulador Precoz 574, dice un Tío Sam dándole la mano a Maduro: «De todos los productos del petróleo…» Y le responde Maduro: «…El diálogo es el producto más refinado», creo que es elocuente la caricatura, más que un acto fallido resulta cínica, el tema que hay detrás del diálogo es el petróleo… Pero ¿qué será lo que intercambiaron?
El diálogo en México:
El diálogo es la cara pública de lo que ha estado negociando el gobierno con EU. La vuelta al diálogo es una exigencia de Estados Unidos para definir el equipo político que representará sus intereses, en sustitución de Guaidó, López, María Corina Machado y similares, y para sustituir a Maduro y al madurismo actual, en un futuro gobierno, después de las elecciones del 2024. ¡»Un producto bien refinado del petróleo», no ha podido definirse mejor!…
De ese diálogo se sabrá quiénes serán los sacrificables y sacrificados, de un lado y del otro. Eso ya lo sabe el gobierno, van a firmar la dimisión a cambio de algunas condiciones ya acordadas que tienen que ver con las petroleras, el petróleo y la restauración de la vieja democracia burguesa, en ejecución, a motus propio por el gobierno, desde antes de ahora; las cuales condiciones no conocemos con exactitud pero nos las imaginamos, ¡secretísimas! (de ellas solo podemos ver sus signos superficiales: nervios, disparates, mentirotas, deserciones…). Sin tales condiciones ya prefiguradas, el madurismo no hubiera aceptado ese diálogo en México, producto de acuerdos tapados hechos en esta coyuntura de guerra, y mil veces negado por Diosdado Cabello en su programa (1)
(1) Hay que buscar los videos del Mazo donde Cabello despotrica de ese diálogo, y aplicarle al «utility» del madurismo el mismo método retro que usa para sus contrarios electorales…
En ese diálogo mexicano confluyen todos los intereses en conflicto gracias al beneplácito del imperio, ha sido santificado por la Casa Blanca y eso basta para conciliar a todos los malcriados. Todo el que quede por fuera, de un lado y del otro, ¡por fuera se quedará!, sin derecho a pataleo, ¡El soberano ha dispuesto!, y no es el pueblo, ¡el verdadero!, ¡los Estados Unidos y sus socios!, el amo de la democracia y de muchas dictaduras.
Maduro cerró el ciclo de la restauración, salga o no salga el madurismo del gobierno la restauración se está consolidando y el pasado se ha instalado de nuevo, ahora solo queda esperar para ver los resultados. Uno de esos síntomas es esa Expo Gobierno 2022, un alarde de cuánto se puede mentir y de cuánta traición, a Chávez y al socialismo, se pudo acumular en 4 años de gobierno…, cuanto se pudo disimular con el cuento del diálogo, de la paz, de las sanciones.
Debería haber una Expo Gobierno de la traición 2022, que explique cuánto se ha avanzado en la liberalización de la economía a través de leyes y decretos, en privatizaciones y en la entrega de recursos y territorios a privados, propios y extraños, en estos 9 años de gobierno. Con la Expo y el 1 x 10 del buen gobierno siguen las distracciones de magos, los disimulos para desviar la mirada del deterioro de la economía y del país, y de lo falsas que son las promesas hechas teniendo un futuro incierto.
La producción petrolera está por el piso, a decir del mismo gobierno; se venden en el mercado capitalista las empresas del Estado para «sostener» el aparato productivo (el cual es capitalista…, o es del Estado, el cual ahora es adquirido por los mismos capitalistas dispuestos a «sostenerlo» con «sus inversiones»…) es decir, se trata de una súper privatización del «aparato productivo del Estado» enmarañada para que no se note en las galimatías de Jesús Farías. Y al final un diálogo que será como la capitulación de Miranda, pero sin nada de gloria histórica.
La deuda social vuelve a ser un problema de Estado, hasta ese punto se ha desviado o desvirtuado el proyecto socialista de Chávez. Chávez tuvo que pagar la deuda social para avanzar en la construcción del socialismo con propiedad. Con Maduro se frenó el avance; se comenzó a retroceder; ahora vuelve el Estado, a través de este gobierno, a estar en deuda con los más pobres destrozándolo todo poniendo por encima de la gente los intereses utilitarios del capitalismo… (Demoliendo los servicios públicos, las misiones, el sistema de salud pública, el sistema de educación, orientando la formación de nuestros jóvenes para servir a las necesidades del capitalismo, formando esclavos o «emprendedores», para que se olviden de la sociedad, del humanismo necesario, y de la vida en general)
Nuestra independencia pendía de pagar esa deuda social y de avanzar como un bloque social, de forma pareja, en la construcción de un nuevo país, en la formación humanística y profesional al servicio de la sociedad: intelectuales, políticos, ingenieros, arquitectos, médicos, científicos, etc. al servicio de la sociedad, para fortalecer el trabajo creador y productivo para la sociedad, ¡nunca para fortalecer privilegios y desigualdades!, como lo hace ahora y cada vez con más cinismo la “burguesía revolucionaria”.
Ahora somos más que nunca dependientes del capitalismo (del capitalista) y de los imperios del planeta (estamos jodidos). Detrás de la Expo yace oculta la mentalidad del colonizado que nos gobierna, aquellos que trabajan al servicio del dinero y el poder. Si no somos independientes como sociedad, si no somos independientes TODOS, nadie es independiente, ni siquiera los ricos, que dependen del dinero y del trabajo ajeno. Sin independencia del capitalismo no hay independencia socialista: igualdad y justicia social.
No se trata de cuatro años de gobierno, son nueve años donde Maduro y el madurismo se olvidó del problema social, del ser humano de carne y sangre, de lo social y del socialismo. No existe manera de maquillar al capitalismo de socialismo, por más creativa que sea la idea publicitaria; es muy difícil disimular toda la espiritualidad que supone la existencia del capitalismo: el egoísmo, la mezquindad que le sigue, la competencia entre los individuos, la indiferencia, el consumismo, la insatisfacción y las apetencias incontroladas por tragar cosas; nada de esas lacras del alma puede sustituirse con 1 x 10, con 3 r.net, con declaraciones y mandatos caprichosos, con «expo gobiernos» de pinochos, con decretos que jalan de un lado al otro a una masa de oportunistas y tontos, eso jamás será socialismo, eso es disimulo de una gran traición al socialismo.
¡VOLVAMOS A CHÁVEZ Y AL PLAN DE LA PATRIA!