La disociación entre capitalismo e imperialismo es ahora común entre los líderes maduristas. Algunos hasta son capaces de desarrollar un discurso anticapitalista, divorciándose ellos mismos de las políticas que ahora adelanta con furia el presidente maduro, de atraer de manera indiscriminada cualquier tipo de inversiones sobre los negocios fabulosos que se hacen con nuestros recursos y riquezas naturales (desde el agua hasta el petróleo; desde el Arco hasta la Faja). El presidente maduro quiere “compartir ganancias” mediante ellos con Trump, así se lo comunica, con su simpática fórmula de “ganar ganar”, que le parece tan novedosa, tan práctica y sencilla al presidente.
Muchos pueden pensar que uno exagera en la interpretación que hacemos sobre lo de “compartir ganancias”, pero no es así, detrás no hay otra razón… Sin embargo, para EEUU ganar solo tiene que ver con ganar países completos, riquezas, hegemonía y poder, no unos cuantos dólares. Eso de “ganar ganar” no va con ellos, a menos que se trate con China o Rusia, y aun así EEUU no se atrevería de hablar con ese lenguaje de conciliadores. Mientras que ganar para maduro significa que lo dejen gobernar un tiempito más, y quizás, que no lo vayan a perseguir por el mundo, a él y a su entorno más cercano… Maduro les ofrece son ganancias materiales compartidas, no, como dice Diosdado, “unas relaciones de respeto” (como si el respeto se pudiera negociar con tu verdugo, y menos con la receta del ganar ganar).
¿Cuál es nuestra situación, bajo la luz que nos puede dar Lenin con su tesis de que el imperialismo fase superior del capitalismo? Pensemos en estos puntos:
“Los Bancos, que antes desempeñaban el modesto papel de intermediarios, se han convertido en “monopolistas omnipotentes” que disponen de casi todo el capital monetario y de la mayor parte de los medios de producción así como de las fuentes de materias primas.” Dice Lenin que ahora son los bancos asociados con el capital industrial, es decir, el llamado “capital financiero”, el que puede exportar capital, pero para hacerse de los recurso y mano de obra baratos de los países más pobres, “el “exceso” de capital es exportado a los países atrasados, donde las materias primas y la mano de obra son baratas, y las ganancias de los capitalistas fabulosamente grandes”. (Estas notas y las que siguen las saqué del diccionario filosófico marxista, 1946)
¿Y qué le ofrece Maduro a los capitales (los mismos de los que habla Lenin)? Recursos: materia prima y mano de obra baratas, es decir, la oportunidad de oro al capitalismo, después de varias revoluciones, para que nuestro pueblo sea explotado, y saqueado el país, salvajemente.
Este es el “nuevo modelo económico” que propone Maduro. con las Zonas Especiales de Desarrollo Económico, con la nueva Ley de promoción y estímulo a las inversiones extranjeras (Es decir: Ley constitucional de inversión extranjera productiva: el eufemismo por delante), aprobada en la ANC – y todos los demás intentos legales de justificar la entrega del país al capitalismo: Plan de la Patria II, Ley del Plan de la Patria (falsificado), motores, congreso de la patria, etc. –. Se trata de conquistar a grandes corporaciones de la minería para que vengan y exploten nuestros recursos (oro, diamantes, coltán, cobre, níquel, etc.) mediante incentivos de todo tipo. Por otro lado, se trata de privatizar la industria petrolera de forma disimulada, “nacionalizarla” con compañías dudosas, de “capital nacional”, y reactivar la producción poniéndola en manos de compañías multinacionales chinas, rusas, y Chevron, etc. – Para eso tuvieron antes que desmantelarla, misión asignada a Quevedo y la guardia nacional, los cuales lo han hecho muy bien –. Y por último la creación de zonas económicas especiales, con regímenes tributarios de excepción, con flexibilización de las leyes laborales, con autonomía para repatriar los capitales y las ganancias, es decir, zonas francas, donde los inversionistas pueden explotar y desarrollar sus actividades con total libertad de acción, sin restricciones de casi ningún tipo. Como complemento a eso, se establece una garantía legal adicional con la Ley constitucional de inversión extranjera productiva que les permite a las empresas resolver sus controversias comerciales con nuestro Estado a través de tribunales internacionales, saltándose nuestras leyes y la constitución: dice el artículo 6: “Siempre que se hayan agotado los recursos judiciales internos y se haya pactado previamente, la República Bolivariana de Venezuela podrá participar y hacer uso de otros mecanismos de solución de controversias construidos en el marco de la integración de América Latina y el Caribe, así como en el marco de otros esquemas de integración.” Estos esquemas pueden ser, desde Mercosur hasta el nefasto CIADI. (¿Alguien cree que habrá transferencia de tecnología, indemnizaciones, u otro tipo de compensación?)
Maduro nos ha vendido el más salvaje y colonial de los capitalismos como antiimperialismo. Pero chavistas como Adán Chávez, el hermano más comunista de Hugo Chávez, parece no relacionar una cosa con la otra, alzando una bandera antiimperialista mundial desde un país que se está ofreciendo al capitalismo imperialista mundial. ¡Tamaña contradicción! ¿Se trata de una disociación grave de ésta dirigencia medrosa, o se trata de otra picardía más, de otro engaño, de otra burla al chavismo?
…Se trata de que los rusos, los chinos, Turquía, etc., están participando de ese reparto, que previó Lenin hace mucho; que estos países hoy día no representan ningún socialismo, son capitalistas y son competidores capitalistas entre ellos por hacerse de los recursos de países como el nuestro; están dentro de esa guerra; y se trata de que Venezuela se encuentra en el medio de ella. Aquí no hay, señor Diosdado, respeto que valga, mucho menos hacia un gobierno que vende su país al mejor postor, como a una meretriz.
«El imperialismo agudizó en medida enorme la lucha de los Estados capitalistas por las colonias. El reparto del mundo entre las “grandes potencias” quedó terminado hacia principios del siglo XX, sin que haya territorios no ocupados por los imperialistas. “De modo que lo que en adelante pueden efectuarse son únicamente nuevos repartos en otra forma, es decir, el paso de territorios de un ‘amo’ a otro, y no el paso de un territorio sin amo a un ‘dueño’… Los bandidos más poderosos “envuelven en su guerra por el reparto de su botín a toda la Tierra” (del mismo diccionario, en su artículo sobre la obra de Lenin)
La única resistencia verdadera es ir en contra de la lógica del capital, es profundizar el socialismo y la revolución.
El capitalismo, y por ende, el imperialismo, solo le teme a la rebelión y conciencia de los pueblos y al socialismo; no nada más proclamado sino practicado. Es una perfecta estupidez proclamarse socialista practicando el capitalismo, y de la forma más colonial, más atrasada que puede haber, como lo hace el gobierno de maduro. Ahora más que nunca cobra valor el plan de la patria de Chávez, el bolivarianismo, el internacionalismo, el socialismo marxista-leninista, científico, tal y como dejó escrito Chávez. Las declaraciones no tienen sentido sin una acción práctica que las apoyen y le den su fuerza y valor. Las palabra que se refieren a la nada, o ancladas en nada, se las lleva el viento.