Ya el asalto al poder por la ideología lumpen sindical presagiaba una catástrofe, y la profecía se cumplió, los incapaces nos dejaron a la deriva a merced de los capitalismos carroñeros. La política grande fue sustituida por la trampa, el chisme, la acusación rastrera, el país fue olvidado y el futuro es incierto.
La calidad de un país se puede dilucidar por la calidad de su política, de sus políticos, allí se resume la actividad vital de una sociedad. Si analizamos la política venezolana en los últimos siete años nos toparemos con la verdadera política de las cloacas, con lentitud poderosa se fue dejando atrás la calidad del pasado, y se cayó en un torneo entre mediocres, que redujo la política a la obscenidad de mentes diminutas, despojada de ideas, de un argumentos de valor sólo el ataque miserable. Ahora encontramos la política reducida a tres cloacas principales, los últimos acontecimientos las revelan con claridad. Veamos.
La primera cloaca que aparece nítida es la gringa: Acusa a personeros del gobierno de narco traficantes, terroristas, corruptos, y con actitud de gendarme mundial pone precio a su captura, (una cantidad que ofende a los acusados). La segunda cloaca aparece en la defensa de los acusados, éstos prenden el ventilador y comienzan a bañar en heces a todo el entorno. No hay un análisis serio de lo que está en juego, no pueden hacerlo, perdieron la dignidad, la fuerza moral que tenía Chávez, perdieron la coherencia al plegarse al capitalismo, al adular a trump, al abrir las puertas a las compañías gringas, al entregar el Arco Minero. Se limitan a acusar al gobierno gringo de narco traficante, terrorista, corrupto, y al chisme de comadres
La tercera cloaca, merece punto aparte, es la franquicia gringa sumada a los pusilánimes y mercenarios. Esta cloaca aparece en toda su ruindad con el destape del general cliver alcala, es difícil imaginar un personaje de esa calaña, ni en la ficción más audaz se puede dibujar tanta torpeza y tanta ingenuidad. Pretendía este grupo derrotar a un gobierno con unos cuatros fusiles y sin ninguna idea de valor, acusando al gobierno de narco traficante, terrorista, corrupto. Hasta aquí todo se reduciría a un general díscolo jugando a la guerrita. Pero falta lo importante, el general devela con más claridad lo que ya sabíamos, la tercera cloaca es más copiosa, el general dice que guaido era su cómplice, lo que deja a guaido como un pésimo estratega que ya suma dos ridiculeces, la del golpe aquel infantil cuando aparece con leopoldo en la autopista de la Carlota, y esta alianza con un general inenarrable. Esta cloaca de guaido, su grupo de los cuatro no tienen otra cosa que ofrecer al país que la entrega descarada a los gringos.
El país, la Patria de Bolívar, de Chávez, no puede seguir en manos de estas tres nulidades, es hora de rescatar la dignidad de Fabricio, de Argimiro, de Américo Silva, que digan presentes los factores de dignidad hoy víctimas de una campaña de descredito, de las mismas acusaciones que se hacen entre si las tres alcantarillas: narco traficantes, terroristas, corruptos, es hora de que las masas, los elementos pensantes despierten, se rebelen de la conducción de quienes fracasaron por ineptos, superen la ingenuidad de creer cualquier mentira. Es hora de arrasar con este gobierno y esta oposición regresar a un gobierno soberano, humanista, antes de que surja el fascismo como forma desesperada de rescate del capitalismo…