La falta absoluta de gasolina en el país es el resultado de 7 años de improvisación, suspensión de procesos, desvío de recursos y mala gestión del gobierno de maduro al frente de PDVSA.
Nosotros hemos venido denunciando, advirtiendo, desde el mismo año 2014, que “PDVSA es una empresa grande y complicada, el petróleo es una actividad compleja, no se puede improvisar”. Nadie hizo caso, pensaban que eran “cosas de Ramírez”, que era un asunto de no querer salir de la “zona de confort”, una lucha de poder.
En mis escritos he advertido reiteradamente el peligro que corría el país por la destrucción de nuestra industria petrolera, lo irresponsable de la actuación del gobierno en nuestra principal empresa, reflejada en la suspensión de todos los procesos de contratación de obras, servicios, mantenimiento de nuestras plantas y operaciones, todo con el fin de disponer de los recursos operacionales de PDVSA para otras prioridades del gobierno, y así debilitar a la empresa, “acabar con el modelo petrolero”, para luego venderla, entregarla a los nuevos grupos de poder.
Nadie atendió, nadie quiso escuchar; por el contrario, el gobierno y los voceros del madurismo enfilaron toda su batería de odio en mi contra para descalificarme y arremeter contra los trabajadores y gerentes de PDVSA; mientras que otros líderes históricos del PSUV y del sector militar callaron. Hoy nosotros estamos exiliados, cientos de trabajadores están presos y PDVSA está en ruinas.
La violencia, la persecución y el miedo, sumado a un sistemático proceso de descalificación e incitación al odio contra nuestros trabajadores, fue la forma que consiguió el madurismo para entrar a “bocajarro” en PDVSA, militarizaron la empresa con el fin de reprimir a los trabajadores y poder entregarla sin resistencia alguna. quevedo hizo el papel de tonto útil y represor, desmantelando la empresa. Triste papel para un General de la República.
De la situación actual de PDVSA yo salvo mi responsabilidad y la de Chávez: con nosotros nunca faltó la gasolina.
Hasta 2014 teníamos un parque refinador nacional que procesó ese año 1,2 millones de barriles día de petróleo y produjo 660 mil barriles día de combustibles para abastecer completamente el mercado interno y exportar 400 mil barriles día.
Nunca descuidamos nuestros presupuestos de inversión, costos y gastos en ningún área de PDVSA, en el lapso 2004-2014 invertimos 471.645 millones de dólares entre costos de operación, costos y gastos e inversión, para el sector refinación nacional fueron, por los mismos conceptos 42.308 millones de dólares.
Contábamos con los mejores gerentes y expertos al frente de nuestras refinerías. Gerentes y trabajadores con credenciales técnicas, experiencia y compromiso con el país y lo demostraron cuando reactivaron todas nuestras refinerías, luego del artero sabotaje (golpe) petrolero de 2002-2003.
Hoy día, esos mismos gerentes están presos-secuestrados en las cárceles del gobierno como si fuesen delincuentes y muchos otros fueron puestos de lado, acusados de “ramiristas” o simplemente “Chavistas no-maduristas”, es decir, patriotas.
No fue que en nuestro periodo no tuviésemos conflictos y no sufriésemos la violencia generada por la intolerancia política. Al contrario, entrando al Ministerio de Petróleo, el 17 de julio de 2002, justo después del Golpe de Estado, nos tocó, junto a Alí Rodríguez y el “Grupo Colina”, enfrentar el criminal Sabotaje Petrolero de 2002-2003.
En esta acción desestabilizadora –que tenía como único objetivo derrocar al gobierno constitucional del Presidente Chávez–, nuestro Complejo Refinador de Paraguaná, las refinerías de Amuay-Cardón, fueron detenidas y SABOTEADAS. Igual sucedió con la Refinería El Palito y la Refinería Puerto La Cruz, incluso pararon la Refinería Isla y Bajo Grande. Todo el sistema refinador nacional fue saboteado. En enero de 2003 no producíamos petróleo, ni tampoco combustibles.
En aquella oportunidad, la solidaridad de Trinidad y Tobago, Brasil y Qatar se puso de manifiesto y nos enviaron tres buques con combustibles para hacer frente, de manera temporal, a la situación. Estábamos BLOQUEADOS, pero nosotros entendíamos que la solución era volver a poner operativas nuestras refinerías. Así lo hicimos.
Con los trabajadores y los pocos –hay que decirlo–, gerentes que no se plegaron al sabotaje, fuimos capaces de ir reactivando nuestras refinerías, con Iván Hernández y Jesús Luongo en el CRP, Alejandro Granados y Nelson Martínez en Puerto La Cruz, junto a los trabajadores de El Palito y cientos de obreros y personal jubilado que se incorporaron a las operaciones de arranque.
En medio del caos generalizado del país, con un sabotaje empresarial, donde FEDECÁMARAS y la CTV, juraban que no pararían hasta que se “fuera Chavez”, con violencia en la calle y desestabilización económica, pudimos ir reactivando una a una las refinerías y restablecer la producción de combustibles, y para eso contamos con el apoyo tecnológico de Intevep y la experiencia y compromiso de nuestros trabajadores.
La meritocracia de la vieja PDVSA, la llamada “gente del petróleo”, saboteó y abandonó la empresa entre aplausos de la oposición golpista, haciendo todo el daño posible a PDVSA y al país, perdimos más de 14 mil millones de dólares. Pero así como se fueron miles de gerentes produciendo un daño terrible a PDVSA, ¿quién puede dudarlo?, también se quedaron miles de gerentes y obreros apegados a sus responsabilidades profesionales y comprometidos con el país.
Pero, una vez derrotado el Sabotaje, ni desde el gobierno, ni desde el Ministerio de Petróleo, jamás se nos ocurrió colocar al frente de la Junta Directiva de PDVSA, ni al frente de las Refinerías, a personal que no estuviese calificado, que no tuviese experiencia, ni conocimiento. No colocamos ni “amigos”, ni “compadres”, ni jefes de partidos, ni militares. Al contrario, pusimos a los mejores hombres y mujeres de la industria, comprometidos con el país, al frente de la batalla por el rescate de PDVSA y lo logramos.
Derrotamos el sabotaje, restablecimos la producción de petróleo de los 23 mil barriles día de enero de 2003, hasta 3 millones de barriles día para ese mismo año.
Restablecimos las operaciones de todas nuestras refinerías, fuimos capaces de producir gasolina, diésel, GLP y todos los productos que requería el país, y también para exportar. Junto al Pueblo y los trabajadores, refundamos PDVSA y así nació la “PDVSA Roja Rojita”, la PDVSA del pueblo.
Esta normalidad, conquistada junto al pueblo, se mantuvo hasta el año 2014. No sólo porque lo digamos nosotros con números, con informes de gestión anualmente auditados por empresas internacionales de mayor prestigio en el área, sino, lo más importante, es que el país y los ciudadanos lo sentían en su día a día. CON NOSOTROS NUNCA FALTÓ LA GASOLINA, había suficiente producción para abastecer el mercado interno con gasolina, diésel, fuel oil, lubricantes, GLP, todo lo que requería el país y, además, exportábamos. No había colas, no había caos, tampoco racionamiento.
¿Por qué no hay gasolina?
Veamos, hablemos con los hechos, esto es lo que ha pasado en 6 años, entre 2014-2020.
- No hay producción de petróleo, ni gas, para alimentar las refinerías. La producción está actualmente en 339 mil barriles día, una caída de 2,644 millones de barriles día con respecto a la producción de 3 millones día del año 2013. Estamos en los niveles de producción de 1930.
- El poco petróleo que se produce, lo utiliza PDVSA para pagar a las empresas europeas por el gas que éstas producen en el Golfo de Venezuela, por un gas que es nuestro y al cual PDVSA renunció en 2015.
- Los volúmenes restantes, están comprometidos con el pago de la deuda contraída con China y Rusia. Por lo tanto no hay suficientes ingresos petroleros, por eso el gobierno vende el oro del BCV, acaba con el Arco Minero y sigue vendiendo a PDVSA por pedazos.
- Las Refinerías venezolanas Amuay, Cardón, Bajo Grande, El Palito y Puerto La Cruz que, en 2014, produjeron 1,2 millones de barriles de combustibles –gasolina, diésel, fuel oil, GLP, lubricantes, etc.–, hoy día operan sólo al 30% de sus capacidades; y, otras, como en Puerto la Cruz, están completamente detenidas.
- Desde 2015, el gobierno removió o encarceló a los gerentes y trabajadores que estaban en puestos de dirección del Sistema Refinador venezolano. Utilizaron el supuesto “control obrero” para entregar el control a sectores maduristas que responden a will rangel y exigían sus cuotas de poder en PDVSA, esto en áreas donde se requiere una gran especialización y conocimiento técnico. Pura insensatez y demagogia.
- En la Junta Directiva de PDVSA, luego de remover y encarcelar a Jesús Luongo (Héroe en la reactivación del Coloso de Paraguaná, luego de la derrota del Sabotaje Petrolero), colocaron como vicepresidente de Refinación a un ex-militar, amigo de otro ex-militar del gobierno, sin ninguna experiencia en el sector refinación y, como Vicepresidente de Comercio y Suministro, colocaron a Serrano, jefe de la sala de twitter de tareck el aissami; para luego entregar estas actividades a traders muy allegados de los hermanos rodríguez.
- A finales de 2014, la vicepresidencia de finanzas de PDVSA fue entregada a erick malpica, ex administrador de la cancillería y familiar de maduro, y a simón zerpa, ex ayudante de maduro –ambos sin experiencia ni capacidad, cuyo único mérito es ser incondicionales a maduro–, para controlar todos los recursos de la empresa y, desde ese momento, se inició el desvío de los fondos presupuestados para los costos, gastos, mantenimiento e inversión del sector refinador, tal como lo denunció Eulogio del Pino (ex presidente de PDVSA y ex ministro de Petróleo), en un video en el que Del Pino se grabó, antes de su detención por parte del gobierno, en diciembre de 2017.
- En el gobierno estaban tan ansiosos de disponer de fondos de PDVSA, que tomaron, los recursos del Fondo de Pensiones de los trabajadores y jubilados petroleros, en noviembre de 2018 y eliminaron buena parte de los beneficios y conquistas laborales consagradas en la Convención Colectiva Petrolera.
- El mismo maduro en cadena nacional, fuera de sí, exaltado, anunció que “todos los contratos de PDVSA pasarían ahora por Miraflores para su revisión por parte del entonces vicepresidente de economía tareck el aissami”.
¡Más de cien mil contratos anuales!, todos los procesos necesarios para mantener la continuidad de la empresa, “aprobados” por Miraflores, saltándose todos los Comités de licitaciones, normas y procedimientos, los sistemas de control y procedimientos establecidos en las leyes de la República.
El “aquelarre” del gobierno, contraviniendo el mínimo sentido común de cómo manejar una corporación de, en aquel entonces, más de 100 mil trabajadores y 329 filiales, y 284 mil millones de dólares en activos.
- Si se desvían los recursos presupuestarios y no se les realiza mantenimiento, lo cual requiere de compras de insumos, además de inversiones y adecuaciones, las refinerías tienen que parar, ya que no pueden operar en condiciones de riesgo.
- Si los servicios que requieren las refinerías, como electricidad, vapor, aire, etc., fallan, las refinerías pierden confiabilidad y las plantas paran y, en consecuencia, se paralizan los procesos aguas abajo.
Las sanciones
- Las sanciones contra el país y PDVSA son repudiables, sin duda afectan el desempeño económico del país, pero no son la causa de los problemas que tenemos actualmente.
- Nuestra empresa, PDVSA, fue sancionada en 2010 por los EE.UU., debido a las relaciones de nuestro gobierno con Irán. Sin embargo nuestra empresa tenía al máximo todas sus capacidades operativas y nosotros, al frente de la Junta Directiva de PDVSA y del Ministerio de Petróleo, nos habíamos preparado siempre para una eventualidad de ese tipo,por eso no nos afectaron.
- Sin embargo, en el gobierno de maduro, las sanciones son la excusa perfecta, entre tantas otras de sus preferidas: “conspiraciones”, “corrupción”, “sanciones”, “marines”, “planes terroristas”, etc. Las sanciones contra PDVSA se aplicaron a principios de 2019, cuando ya el daño estaba hecho por el propio gobierno.
- Todos los insumos necesarios para la producción de combustibles que requiere el país se pueden obtener en el mercado abierto, en India o en países cercanos al gobierno como Rusia y China, por lo cual las sanciones no puede ser una excusa.
- En 2014 dejamos 87 buques de transporte con nuestras empresas mixtas, incluyendo 4 grandes VLCC (Ayacucho, Boyacá, Carabobo y Junín), de esta flota 37 buques eran propios.
- Países que están verdaderamente bloqueados como Cuba e Irán, no sólo no tienen los problemas que tenemos nosotros con el abastecimiento de gasolina, sino que pueden abastecer su mercado interno y exportar, como es el caso de Irán.
- Países que han pasado guerras como Irak o que están en medio de una cruenta guerra como Siria, tienen refinerías operando con capacidades de 761,8 y 240 mil barriles día respectivamente.
- Evidentemente, en Venezuela, el problema principal es el gobierno y su incapacidad en la gestión no sólo de la industria petrolera sino de todo el país.
Nuestro circuito internacional.
EE.UU.
- Hasta 2019, PDVSA tenía el control y era propietaria del Circuito Citgo, el cual fue confiscado por la administración norteamericana y transferida su administración al partido político de guaidó a partir de febrero de 2019, “La Entrega anunciada”, tal como lo dijimos en su oportunidad.
- Citgo tiene una capacidad de refinación de 764.765 millones de barriles día, ciertamente, la oposición no ha hecho ni hará nada para ayudar en el suministro de combustibles al país; por el contrario, ellos han pedido más sanciones en su estrategia de colapsarlo. Esos volúmenes ayudarían al país, mientras se supera la crisis. Pero eso no va a suceder.
Ahora, durante el sabotaje petrolero, Citgo tampoco hizo nada para ayudarnos. Esas empresas en el exterior nunca han apoyado a PDVSA en situaciones de crisis, ni antes, ni ahora ni tampoco lo harán.
El Caribe.
- Hasta 2015, teníamos en El Caribe una importante presencia en las refinerías con participación o arrendamiento: Refinería Cienfuegos, en Cuba, con 49% de participación y 65 mil barriles día de capacidad; Refidomsa en República Dominicana, con 49% de participación y 34 mil barriles día de capacidad; PETROJAM, en Jamaica, con 49% de participación y 36 mil barriles día de capacidad y Refinería Isla, bajo la modalidad de arrendamiento, con 335 mil barriles día de capacidad.
- Es decir, nuestra participación en esas refinerías del Caribe sumaba 401 mil barriles día, suficiente para atender la emergencia, mientras se reactivan las nuestras.
- Pero, ¿qué ha pasado con estas refinerías y nuestra participación? Veamos:
- La refinería de Cienfuegos en Cuba fue cedida, por el gobierno de maduro, a la estatal cubana Cupet por solicitud de delcy rodríguez en punto de Cuenta número 045-16, con el argumento de que “debíamos dinero a Cuba”. Una operación de la cual no se informó al país, ni tampoco a los órganos de control competentes
- En las refinerías de Refidomsa y Petrojam, PDVSA perdió el control, ya no tiene participación. No se sabe nada, ni cómo, ni porqué, pero no contamos más con esos volúmenes.
- Las autoridades de la Isla de Curazao rescindieron, es decir, no renovaron el acuerdo con PDVSA y están en búsqueda de otro refinador, nosotros no contamos con esos volúmenes.
El debate
Es necesario para el país abrir un debate sobre qué ha pasado con PDVSA en este período nefasto de 2014-2020.
Leí un artículo de Luis Britto García donde el Constituyentista se daba cuenta del plan de privatización de la Comisión ARA que denunciamos el pasado primero de mayo, y pedía un informe de lo que ha pasado en este período, lo que me parece excelente, sobre todo si se considera que desde 2015 ni el gobierno ni PDVSA han presentado, ni hecho público, y mucho menos discutido en la Asamblea Nacional o la Asamblea Nacional Constituyente, el Informe de gestión anual.
Por lo que debemos exigir rendición de cuentas, ir al debate junto al pueblo, en la Constituyente (antes de que maduro la cierre).
De nuestra parte, cada uno de los años del período 2004-2014, cuentan con sus Informes Financieros auditados por la KPMG (empresa internacional de auditoría contra la que ahora los maduristas arremeten), presentados por mí cada inicio de año y discutidos de manera pública ante el país.
También están publicados todos los informes de gestión, operacional, sometidos al escrutinio de la Asamblea Nacional y de todos los órganos de control del Estado. Allí están. Quien quiera buscar la verdad, debe hacerlo hasta debajo de las piedras.
En ese debate yo debo participar, tengo muchas cosas que decir, debe participar maduro, tiene muchas cosas que explicar, también deben participar los gerentes y trabajadores presos; otros, lamentablemente no podrán hacerlo, como Nelson Martínez, muerto en custodia, pero la Junta Directiva de CITGO emboscada y presa por el gobierno, sus integrantes, podrán explicar muchas cosas al país.
Vamos al debate a discutir las claras intenciones privatizadoras de maduro, sus Decretos y Sentencias, la violación de la Constitución y la entrega de nuestro petróleo, las Leyes aprobadas en la propia Asamblea Nacional Constituyente. Vamos al debate para frenar el Plan privatizador de la Comisión Alí Rodriguez Araque y la propuesta entreguista de la Asamblea Nacional, pretensiones y planes que hemos denunciado oportunamente.
Todas estas acciones tienen como objetivo la entrega de nuestro petróleo, privatizar PDVSA con la ilusión absurda de que “otros”, las transnacionales y “agentes del gobierno” resolverán nuestros problemas, con el interés oculto de descuajar la patria para quedarse con ella. Estas se enmarcan en el compromiso de un “nuevo pacto” entre las élites políticas, donde la entrega de nuestro petróleo es la mayor exigencia de los intereses nacionales de siempre aunque cambien de rostro y de las transnacionales.
Ahora, luego del desastre de maduro, se habla abiertamente de la entrega del petróleo, de la privatización de PDVSA, como si fuese una fatalidad de la que el país no puede escapar.
La entrega del petróleo y la privatización de PDVSA, algo impensable aún en 2014, hoy es un punto de encuentro entre el madurismo y la oposición. Mientras, el pueblo está, literalmente, pegando carreras de un lado a otro para resolver el día a día, pasar horas y días en una cola para surtir gasolina, resignado a una calamidad que no tiene ninguna razón de ser. Mientras, los militares y los dirigentes políticos se acomodan a la nueva situación e insisten en evadir sus responsabilidades y hacer “lo que maduro diga”.
¿Cómo resolver esta crisis de escasez de combustibles?
Muchos amigos, de buena intención, me piden algunas líneas de cómo resolver este tema de la gasolina. Voy.
Lo primero que debo decir es que, como todos los conocedores del sector saben, en PDVSA no tenemos ningún problema técnico, no hay ni misterios, ni secretos, el rescate de PDVSA después del Sabotaje Petrolero nos dejó una gran lección: el problema de PDVSA no es técnico, es político.
- Lo primero es que podamos volver a la patria y ponernos al frente de un equipo especial para atender la situación de PDVSA y del país, una Junta Patriótica de Gobierno, que puede ser electa incluso mediante un referéndum que revoque a maduro y abra camino al restablecimiento de la Constitución y devuelva el poder al Pueblo.
- Entre las tareas urgentes de esta Junta Patriótica de Gobierno, una Bolivariana y revolucionaria, será abocarse a resolver el tema petrolero el cual conlleva a la resolución de la crisis económica y social del país.
- Liberar a todos los gerentes y trabajadores presos, y cesar la persecución. Nombrar nuevas autoridades en PDVSA y en el Ministerio de Petróleo.
- Un nuevo gobierno con un nuevo equipo económico para el país.
- Revocar la creación de la Comisión ARA así como los Decretos y sentencias entreguistas del petróleo y el gas y privatizadoras de PDVSA.
- La Junta Patriótica debe hacer un acto público, masivo, de desagravio y reconocimiento a los trabajadores petroleros, a PDVSA, por parte de todo el país.
- Reafirmar el carácter de PDVSA como nuestra operadora nacional, 100% propiedad del Estado venezolano, una empresa nacional al servicio del Pueblo.
- Restablecer la plena vigencia de la Ley Orgánica de Hidrocarburos y la Reserva Constitucional sobre el petróleo y el Rango Constitucional de PDVSA.
- Restablecer la política de Plena Soberanía Petrolera.
- Conformar equipos de trabajo en PDVSA con los mejores gerentes, técnicos, especialistas, con los más comprometidos, con experiencia y determinación, para evaluar el daño a la industria y poder hacerle frente a la contingencia.
- Afinar el Plan de rescate de PDVSA.
- Convocar a todos los que se han ido para que vuelvan a sus puestos de trabajo, a rescatar la empresa y volver a ponerla al servicio del pueblo, y reconocerlos como servidores de primera línea del país.
- Desmilitarizar la empresa. La Fuerza Armada Bolivariana debe ponerse al servicio de la recuperación del sector, prestando seguridad y apoyo en las tareas de emergencia.
- Todo el gobierno, la Junta Patriótica, el nuevo gobierno y nuevas autoridades, deben abocarse en la recuperación de la industria.
- Todos los recursos del país deben concentrarse en la recuperación de las áreas de producción, refinación y las instalaciones de PDVSA. Es necesario un régimen económico temporal especial para el sector.
- Es necesario planificar el ciclo económico de la empresa con un presupuesto de emergencia, priorizar y concentrar los recursos y restablecer gradualmente el régimen fiscal, construir un fondo de rescate.
- Es necesario contar con todos los trabajadores, activos y jubilados, se debe hacer un llamado para que acudan a la empresa y se movilicen para atender la emergencia.
- Deben restablecerse los beneficios y conquistas laborales arrebatados a los trabajadores. Restablecer la plena participación y libertad sindical en la empresa, todos concentrados en un Plan Único de Recuperación.
- Hacer una concentración de esfuerzos en las áreas más productivas, medulares de la industria. Establecer una organización temporal, ágil, que permita atender la contingencia en Oriente, Faja y Occidente.
- Restablecer las líneas de trabajo con los proveedores de bienes y servicios, nacionales e internacionales. Trabajar con el sector financiero bajo un esquema flexible de financiamiento, soportado en la recuperación de la producción.
- Todos los trabajadores y fuerzas del país deben abocarse a restablecer la operatividad de todas las instalaciones de la industria: trabajadores, universidades, centros de investigación profesionales, proveedores.
- En el sector refinación, es necesario restablecer la dirección de gestión de las refinerías con los profesionales más capaces y conocedores, los más desprendidos y comprometidos con el país. Que tengan autoridad y prestigio y cuenten con el apoyo de los trabajadores, capaces de ir garantizando la confiabilidad en los procesos e instalaciones.
- Restablecer el suministro de petróleo y gas a las Refinerías, hacer evaluaciones de riesgo, de confiabilidad operacional, priorizar la producción de gasolina y diesel.
- Establecer un presupuesto especial, para reparaciones y labores de contingencia para restablecer las operaciones, en las unidades críticas, servicios sensibles, con la prioridad de atender el mercado interno.
- Revisión de todas las relaciones internacionales: aliados, proveedores, acuerdos comerciales, cadenas de suministro.
Éstas son sólo algunas de las ideas que hemos venido trabajando con un grupo de compañeros de la industria petrolera, con experiencia y compromiso, y serían algunas de las medidas del Plan de Gobierno y Decretos de la Junta Patriótica de Gobierno. Una necesidad que cada vez resulta más urgente.
No se trata solo de rescatar la industria petrolera y volverla a poner al servicio del pueblo, del futuro; se trata de todo el país, es una crisis sistémica, no es solo un sector que está en crisis. Es todo.
Para emprender esta batalla por la reconstrucción de nuestra industria petrolera y de todo el país, debemos dar lo mejor de nosotros como pueblo, resaltar lo afirmativo venezolano, devolver la esperanza, dejar atrás los intereses mezquinos, el odio, la intolerancia. Debe ser un renacer espiritual de la patria, tenemos cómo.
Por ello, debemos tener conciencia de nuestro papel histórico y debemos volver al pueblo, a la Constitución, a las leyes, al deber social, el vivir bien. Volver a los objetivos históricos del Plan de la Patria, retomar el camino de Chávez, trabajar juntos, los verdaderos patriotas, a los que nos duele lo que han hecho con nuestro país, nuestras empresas, nuestras instituciones, nuestro pueblo, nuestro futuro. Movilizarnos para dejar atrás al madurismo, la “noche más oscura” de nuestra patria ¡Venceremos!