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El yate de Evo

Para alguien desprevenido que lea la noticia del viaje deEvo a México en avión prestado y quiera indagar la causa del sorpresivo traslado, tendrá que sumergirse necesariamente en una “realidad ficticia”. Veamos.

El Presidente Evo renuncio al cargo, es la primera deformación: resulta que presionan a un Presidente para que renuncie al cargo bajo amenaza a sus partidarios y a su familia, y tienen la desvergüenza de afirmar sin más adornos que renunció.

Después llegan los jurisconsultos y sentencian: no fue un golpe porque  Evo había hecho fraude (nunca comprobado, ni siquiera investigado) y lo que hubo fue una restitución de la democracia.

Establecida la realidad ficticia de la “legalidad” de eso que no fue un golpe, pasan a la segunda etapa: desprestigiar a Evo: lo primero es crearle la imagen de corrupto, se habla de mansiones en Cochabamba, de ropa hecha a la medida, de vida regalada. El descredito sigue hasta lo inverosímil, se llegará a hablar de un yate, seguro, en toda campaña de descredito siempre entra un yate y un palacio, recuerden el yate de aristóbulo, la avioneta de Rina Ron, y recientemente el palacete del Ministro Ramírez (por cierto maduro se hizo el wilis con la invitación a debate con Ramírez). El yate de Evo es emblemático de esta práctica de crear imágenes negativas de los enemigos. Algunos lo defenderán diciendo ¿Cómo va a tener un yate si en Bolivia no hay mar? los deformadores le responderán, lo tenía esperando para el día que pactaran una salida al mar con Chile.

Bolivia nos trae muchas enseñanzas, se podría hablar del agotamiento del poder, de Revolución que se detiene se la lleva el río, muchos temas se pueden tocar, hoy exploraremos la manipulación psíquica como arma política del capitalismo. Después de focalizarse en Evo, “demostrar” que fue Evo el golpista, pasan a la etapa de los falsos testimonios, siempre habrá alguien que se preste a sazonar la mentira.

Aquí entre nosotros el guión es similar: No pueden enfilar contra el Comandante Chávez, ese prestigio los sostiene, pero consiguieron un chivo expiatorio, un paga pego, le disparan a Chávez por interpuestas personas.

Allí no queda la manipulación psíquica, las acusaciones de agentes de la cia vuelan irresponsablemente, cualquier disidencia por mínima que sea es inmediatamente bombardeada, desprestigiada. Pero, es en la manipulación de la gestión del gobierno donde se manifiesta mejor la manipulación psíquica. Si nos atenemos a lo que el gobierno publicita, maduro sería el mejor gobierno de la historia nuestra y del mundo: nunca se ha equivocado, nada le ha salido mal, no hay problemas, todo perfecto. El madurismoes experto en buscar culpables, en excusarse, en escurrir el bulto. Esconde el brutal éxodo, sólo lo acepta a conveniencia. Todo es culpa del camarada trump, no hay crisis económica, hay guerra económica, a PDVSA la destruyeron los que producían tres millones de barriles, y la salvaron los que producen quinientos mil.

Los intentos revolucionarios, se enfrenta a la manipulación psíquica, es allí en el alma de las masas donde se escenifica la principal batalla por la conducción de la sociedad, no es posible un triunfo revolucionario sin antes triunfar en la batalla espiritual. No es tarea fácil. lo primero es identificar el problema, prepararse para hacerle frente.

La batalla es desigual, ellos tienen en su campo poderosos medios de comunicación, universidades, gobiernos, agencias de noticias internacionales, la iglesia, la costumbre. La Revolución tiene a su favor la razón, la verdad, las terribles condiciones objetivas: las dificultades de la existencia, el deterioro ambiental, el fracaso del capitalismo.

El problema es cómo llevar esa verdad, esa razón al corazón de las masas, allí se resume la acción política. El ejemplo es la mejor escuela, ya lo decía un clásico: más aprende un pueblo en un año de lucha que en un siglo de paz,  y podríamos agregar nosotros: más aprende un pueblo por una acción de su vanguardia”, o mejor “la Vanguardia es reconocida en la acción”.

Lula está libre: buena noticia, pero en Venezuela Baduel sigue enjaulado y Rafael Ramírez está expatriado

Los tinterillos del madurismo hacen malabares en sus escritos para exculpar a su jefe de las arbitrariedades y desmanes cometidos, durante estos años de gobierno, por los instrumentos represivos del régimen, tribunales y jueces. Tal sistema es hoy día una franquicia de Miraflores. Sus funcionarios actúan en su gran mayoría como simples empleados del presidente de la república, como subalternos que desadministran las leyes nacionales según las instrucciones recibidas del palacio presidencial.

La independencia de la justicia, un principio básico, de la democracia, no existe en nuestro país. maduro se encargó de destruirlo. Las oficinas de Miraflores sustituyeron las del Tribunal Supremo de Justicia. Allí es donde en verdad se administran las leyes del país, se sentencia o se absuelve. Los jueces firman luego el documento correspondiente.

En América Latina el mejor ejemplo de judicialización de la política ocurre aquí en nuestro país, con maduro ejerciendo la presidencia de la república. Centenares de casos están allí a simple vista para corroborar tal aberración. Pero los tinterillos del cacique ocupante de la silla de Miraflores, dirigen su mirada hacia el Brasil de Bolsonaro, hacia la Argentina de Macri o hacia el Ecuador de Lenín Moreno, países donde en verdad el lawfare o judicialización de la política es práctica habitual, igual que aquí en venezuela. Se persigue, acusa y encierra a opositores políticos utilizando con este fin jueces y tribunales. Diecisiete meses de cárcel guardó Lula Dasilva, la víctima principal de esta práctica aberrante en el Brasil de Bolsonaro. Lo acusaron de haber recibido un apartamento, regalado por parte de la empresa Odebrech, a cambio de la firma de contratos para la construcción de obras con dinero público. Jamás se comprobó esta acusación, sin embargo, jueces venales, ordenaron su arresto. En verdad la jugada contra Lula se realizó para evitar su reelección como presidente de Brasil. Algo parecido intentó hacer Macri en Argentina, contra Cristina Fernández. Cuatro años de amedrentamiento y persecución sufrió la expresidenta. Numerosas acusaciones se consignaron en tribunales de ese país, jefaturados por amigos de Macri. Pero ninguno logró sustentar con elementos probatorios sus acusaciones. No obstante, la expresidenta, junto a sus hijos, sufrió numerosos atropellos. Y en Ecuador, ahora bajo la presidencia de Lenín Moreno, se desató una persecución furiosa contra Rafael Correa y varios funcionarios de su gobierno. La excusa fue la lucha contra la corrupción. Y por efecto de tal persecución algunos allegados al expresidente han sido apresados, como ocurrió con el vicepresidente Jorge Glas, mientras otros fueron obligados a huir y pedir asilo en naciones latinoamericanos. Correa, por su parte, tiene orden de aprensión, en caso de retornar a su país.

En nuestra afligida Venezuela, maduro y su corte de felicitadores, de la misma forma que Macri, Bolsonaro y Moreno, no dan cuartel a sus opositores políticos, a quienes persiguen con mucha saña, valiéndose para ello de tribunales y jueces, ahora convertidos en servidores de los antojos del inquilino de Miraflores y del jefe del PSUV. Es la justicia al servicio de los caciques circunstanciales de la política. Y en esta dirección se violenta todo: la Constitución, las Leyes, los Códigos, los Reglamentos, la Jurisprudencia, los Tratados, los Acuerdos, las resoluciones, etc. El caudillo manda como le da la gana y punto. Y a obedecer todo el mundo. El que desacate, está destituido o va preso, acusado de cualquier delito. Es el reino de la arbitrariedad lo que se ha impuesto en nuestro país. El desamparo legal es total. Y los tinterillos y enchufados, como Elías Jaua, justifican tales arbitrariedades o sino miran hacia afuera, para criticar allende los mares lo mismo que aquí maduro acomete con mayor arbitrariedad que todos los presidentes nombrados.

Víctima en nuestro país de las arbitrariedades del inquilino de Miraflores son, entre otros muchos, el general Baduel y Rafael Ramírez. Se acusa a estos de cualquier cosa. Y presto han salido los miembros del Tribunal Supremo de Justicia y el Fiscal del PSUV a refrendar la acusación. Que si traidores, que si corruptos, que si desleales, que si las cuentas bancarias. El mismo que acusa, juzga y sentencia. En ningún caso se ha cumplido el debido proceso, ni se le ha permitido el derecho a la defensa. El primero lleva más de una década encarcelado. Y continua allí en las mazmorras del régimen, víctima de atropellos, maltratos, aislado e impedido de recibir visitas familiares. Peor que Bolsonaro se ha demostrado el presidente de aquí con Raúl Isaías Baduel, el general del ejército venezolano que con su actuación en los días posteriores al golpe de Estado de abril de 2001 impidió la consolidación del mismo y que Chávez fuera destituido y encarcelado. El general Baduel fue comandante general del Ejército venezolano desde enero de 2004 hasta julio de 2006, y ministro de la Defensa desde junio de 2006 hasta julio de 2007. En el 2009 fue apresado luego de manifestarse en contra de la reforma constitucional promovida por Chávez. Se le inventó la excusa de haberse apropiado de dinero público y cumplió una condena de casi ocho años. En agosto de 2015 recibió libertad condicional, pero en 2017 fue a la cárcel de nuevo, acusado esta vez de varios delitos en contra de la independencia e integridad de la nación. Los familiares de Baduel han denunciado que el General se encuentra incomunicado sin recibir libros ni visitas de nadie, en una celda de aislamiento en el Fuerte Tiuna.

Por su lado, Rafael Ramírez se desempeñó entre 2002 y 2013, como Ministro de Petróleo y Minería y como presidente de Petróleos de Venezuela (PDVSA). En septiembre de 2014 es designado Ministro de relaciones Exteriores de Venezuela. En 2014, es nombrado Representante Permanente de Venezuela ante las Naciones Unidas. ​Y en diciembre de 2017 fue removido del cargo de embajador de Venezuela ante la ONU. Desde entonces se encuentra fuera de Venezuela. maduro, tharek william saab y el coro de voces laudatorias del PSUV lo acusan de delitos contra el patrimonio público y lo esperan aquí para meterlo en la cárcel, según han afirmado ellos mismos. Dicen, sin demostrar nada que posee cuentas bancarias millonarias en la banca internacional y que vive en una mansión en Italia. Pero no presentan ninguna prueba documentada. Y al unísono los medios de comunicación a su servicio repiten la afrenta. Y ya está defenestrado el otrora ministro de Chávez y camarada político del partido de gobierno. ¿Porqué no dejan que regrese Ramírez a nuestro país y se defienda tal como la Constitución y demás leyes establecen? ¿Será que todos temen a Ramírez en las calles de Venezuela acusando y defendiéndose? ¿Será que les produce terror la inteligencia, el conocimiento, el verbo y el liderazgo de Ramírez?

A ver, Elías Jaua, deja de mirar hacia Brasil y condenar el sistema judicial de este país que, aun muy arbitrario, admite la excarcelación de Lula. Observa hacia nuestra propia realidad nacional y escribe para condenar el lawfare instituido por maduro, que no admite siquiera la excarcelación de viejos camaradas tuyos, hoy víctimas del gobierno que tú integraste. Estás emplazado.

Por cierto, recomiendo la lectura, en Aporrea del lunes 11-11-19, del artículo escrito por Rafael Ramírez sobre el caso Boliviano. Profundo, esclarecedor, bien argumentado, irrebatible, escrito con maestría, nada parecido a los grotescos ditirambos que salen de la boca de diosdado, maduro, arreaza y resto de cortesanos del PSUV sobre el mismo asunto. En estos casos sobreabundan los gritos y los insultos, las guapetonerías rimbombantes de gente simplona, que no estudia ni lee nada, y en su defecto lo que hace es repetir los estribillos cansones, las consignas vacías, la retórica estridente, el gamelote escandaloso. Muy ruidosos pero insípidos.

Búsquenlos hasta debajo de las piedras

Cada país es una complejidad difícil de captar, no obstante todo proceso social tiene un componente universal, enseñanzas comunes. con ese criterio nos debemos acercar a la situación que hoy vive el continente.

¿Qué hay de común en todas las conmociones sociales que hoy vive la América?. Veamos.

Todos los países son capitalistas de eso no hay dudas, todos padecen el ciclo de la dominación capitalista: gobiernos duros son sucedidos por gobiernos más permisivos, o si se quiere gobiernos de derecha son sucedidos por gobiernos de izquierda y estos a su vez por gobiernos de derecha, en ese ciclo danza la dominación sin correr ningún peligro. Los analistas de izquierda se alegran cuando llega el período de la izquierda, hablan de un giro del continente, los de derechas se alegran cuando llega su vez y hablan de derrotas del comunismo y otras tonterías más.  Los gobiernos de izquierda funcionan como unos “monosabios”, los gobierno de derecha fumigan la plaga revolucionaria que surja en las grietas, los dos se turnan para mantener al capitalismo. Ya Chávez nos advertía del reformismo que el otro nombre de la izquierda.

El ciclo es perverso va filtrando, anulando los brotes revolucionarios, detecta a los dirigentes revolucionarios y los aniquila de cualquier manera ya sea linchamiento moral, ya franco asesinato, a unos los compra, los transforma en reformistas radicales, inventadores de teorías para evitar el rumbo socialista, a otros los desencanta, no ven grieta en el circulo, se rinden. Confina las luchas revolucionarias a metas subalternas, ubica como una meta estratégica recuperar la democracia burguesa, y en los periodos gobiernos de izquierda la meta es aumentar el número de diputados, de alcaldes, lo que llaman los teóricos de la burguesía revolucionaria  ir tomando colinas, los revolucionarios caen victimas de lo que los clásicos llamaron “Cretinismo Parlamentarios”.

La primera barrera en la lucha revolucionaria es detectar esta trampa del capitalismo, denunciar el ciclo perverso. Entender que vivimos en una matrix política en la que todos somos piezas manejadas por laboratorios. De esta trampa deben ser alertadas las generaciones futuras, con la teoría y con la acción, es difícil apreciar el giro de ciclo en el corto tiempo de una existencia humana, es una labor de historiadores y ya sabemos que la historia la escriben los dominantes, la deforman, la manipulan, ocultan el movimiento de la rueda.

El ciclo tiene presencia en el continente. Ahora se alegran los narcotizados porque cristina ganó en Argentina, y ahora se entristecen porque Evo está en México, se alegran porque lula salió, se entristecen porque bolsonaro ganó, en Colombia el ciclo es más lento, en Ecuador giró rápido, en Chile piñera esta a punto de ser fusible quemado para que todo siga igual. El ciclo sigue girando y el capitalista goza de buena salud…

Aquí en Venezuela el ciclo se había trastocado, con Chávez se rompió la buena marcha del ciclo, ya tenía medio siglo girando serenito: la democracia burguesa estaba agotada, debía venir un gobierno fuerte quizá una dictadura y Chávez se coló en esa sucesión. Ahora con el madurismo se retoma el ciclo, se avecina una vuelta, es inevitable la salida del madurismo y la llegada de un gobierno represivo, que buscará, no principalmente a los maduristas, esos son funcionales a los capitalistas, llegarán a pactos, nada les cuesta saltar de nuevo la talanquera, buscarán principalmente y con saña a los verdaderos revolucionarios, a esos hasta debajo de las piedras…

Rafael Ramírez: “El golpe de Estado en Bolivia trunca un gobierno exitoso que ayudó a su pueblo”

El ex hombre fuerte del petróleo en Venezuela considera que “la prepotencia de las élites en América Latina” ponen en juego el bienestar de la gente

Desde algún lugar de Europa Rafael Ramírez se hace solidario con Evo Morales y señala que la situación boliviana hace pensar que la injerencia ha regresado a la región de la mano de las élites políticas y económicas.

“Hay gente matiza los hechos, pero es un golpe de Estado con todas sus letras. La policía se insubordinó y la Fuerza Armada le sacó la alfombra, lo que obligó a Evo a renunciar ante la imposibilidad de proteger a la gente”, sostuvo Ramírez.

Alerta que la gestión económica de Evo Morales era exitosa con resultados en la reducción de la pobreza y el crecimiento económico que redundaron en la mejora en la calidad de vida de los bolivianos.

“El PIB de Bolivia creció 26% desde 2006 y el nivel de desocupación es de 1,2%”, aseguró Ramírez quien acotó que la reducción de la pobreza general pasó de 75% a 15% en la gestión de Morales.

Critica las élites bolivianas. Las considera responsables de un golpe de Estado basado en racismo y como reacción de la “derecha de la región ante la perdida de los espacios que se ganaron en Argentina y de la realidad chilena que pone en tela de juicio las políticas neoliberales”.

Ante la violencia que comienza a verse en Bolivia acusó a Luis Fernando Camacho como responsable por promover “el racismo, los secuestros de niños para obligar a renunciar a los funcionarios”.

“Esto significa un retroceso político para la región. Las elites son intolerantes y se se llevaron por delante a un Presidente de lujo, afirmó Ramírez.

Al hablar de las consecuencias para Venezuela de estos hechos aprovechó para cuestionar a Maduro de quien dijo se aprovecha para “montarse en esa ola”.

“En Venezuela no hay un gobierno socialista ni mucho menos progresista. Maduro es un arrocero en ese mundo de una izquierda latinoamericana renovada que representan Amlo y Fernández. Por eso Evo pide asilo en México y no en Venezuela”, afirma.

El odio de las élites no podrá con Evo

El golpe de Estado consumado en contra del presidente Evo Morales, marca un retroceso político tremendo en nuestra región y en la lucha por construir una sociedad justa, democrática e inclusiva. 

Las élites bolivianas, la derecha agrupada en torno al ex candidato Carlos Mesa y al presidente del Comité Cívico de Santa Cruz, Luis Fernando Camacho, desataron la violencia en el país. En una primera instancia, desconociendo los resultados electorales de las pasadas elecciones, y luego pidiendo abiertamente el derrocamiento del presidente Evo

De inmediato, los grandes medios de desinformación internacional y las redes sociales se activaron en una campaña desestabilizadora, que cabalgaba sobre los mensajes llenos de racismo y desprecio hacia los humildes, ésto es, el pueblo indígena que es mayoría en el país. 

Los acontecimientos se precipitaron, acelerados seguro por la urgencia de derrocar a Evo antes de la toma de posesión de Alberto Fernández en Argentina e impedir un reagrupamiento de gobiernos progresistas en la región. 

Los llamados “Comités Cívicos” de la “Media Luna” boliviana ya habían ensayado su violencia fascista por allá en 2008, sin embargo, la movilización popular y la acción decidida de los gobiernos de la región evitaron el derrocamiento de Evo. Hoy día, Camacho, presidente del “Comité Cívico de Santa Cruz”, es el agente más violento e intolerante de los factores golpistas en Bolivia.

La violencia se desató luego de las pasadas elecciones del 20 de octubre, con la excusa de un supuesto fraude electoral que le daba a Evo una ventaja de 10% sobre Carlos Mesa, lo que le daba a Evo la victoria, sin necesidad de una segunda vuelta.

Carlos Mesa desconoció los resultados; y, junto a Camacho pidieron a sus partidarios lanzarse a la calle. Los grandes medios internacionales y las redes sociales insistieron en atizar la violencia. Nadie propuso soluciones, nadie quería diálogo. Ya la operación desestabilizadora estaba en marcha.

Evo invita a la OEA a realizar una auditoría al proceso electoral, dando, en lo que sería un grave error, preeminencia a un organismo muy desprestigiado en la región, y que ha actuado siempre con un doble rasero e interés injerencista. 

En su informe preliminar, la OEA no habla de 33% de actas irregulares, se refiere a 23% de muestra de 333 actas, de un total de 34.555; lo cual representa solo el 0,22% de las actas, es decir, la muestra no es representativa para determinar irregularidades en todo el proceso.  

Sin embargo, como es lógico suponer y producto de la manipulación tanto mediática como de la misma OEA, el informe preliminar solo arrojó más elementos de dudas al proceso electoral, cuestionándolo como un todo, dando argumentos a la oposición y debilitando aún más la posición del presidente.

Cuando la policía en La Paz y otras ciudades importantes se suma al golpe en marcha, la violencia se desató. Ante la ausencia de la autoridad, los grupos proto fascistas incendiaron casas de los partidarios de Evo, de su hermana, de dirigentes sociales, políticos, funcionarios del gobierno. Las golpizas, secuestros de familiares, quema de las sedes de gobernaciones, la toma de medios de comunicación y las imágenes de torturas y humillaciones de dirigentes indígenas ampliamente difundidas en las redes sociales, exacerbaron la violencia fascista y el miedo.

La respuesta de los movimientos sociales y de los factores políticos que apoyaban al gobierno de Evo fueron tímidas, se desarrolló una marcha a favor de la paz, concentraciones en El Alto y esporádicas expresiones de apoyo en la calle. La violencia fascista estaba golpeando la base social del movimiento indígena de apoyo a Evo.

La posición de las FFAA, de no involucrarse para preservar el orden constitucional, para detener la violencia y  preservar la paz del país, le dio el golpe de gracia al gobierno. Se plegaron al plan golpista y luego conminaron al presidente a renunciar. 

A pesar de que Evo llamó a nuevas elecciones y a renovar al órgano electoral del país, ya la derecha estaba envalentonada y en la calle, imponiendo el terror. Carlos Mesa declara que no tiene nada que negociar con Evo, que este debe apartarse de la presidencia; y que, ni siquiera, debe participar como candidato para un nuevo proceso electoral.

Es, en ese marco de esta situación  de asedio, que el presidente Evo y su vicepresidente García Linera anuncian la renuncia a sus cargos y su disposición a mantenerse en lucha. Se replegaron a las zonas tropicales, campesinas del país. El golpe de Estado se había consumado  

De inmediato, se reciben noticias del fascismo desatado, la quema de casas, el ataque a las embajadas de México, Cuba y Venezuela, las golpizas, humillaciones y  persecuciones contra líderes sociales y del gobierno. La amenaza sobre el mismo Evo y García Linera, la detención de las autoridades del Organismo Electoral, hace prever una oleada de violencia fascista, que nos recuerda lo que pasó en nuestro país, aquel infausto 11 y 12 de abril de 2002.

El presidente Evo Morales y el vicepresidente García Linera merecen todo mi respeto y aprecio. Con Evo tuvimos una relación más estrecha, cercana, porque nos conocimos desde antes de él ser presidente y porque luego nos tocó trabajar junto al presidente Chávez, en tantos temas de cooperación bilateral, sobre todo, en el proceso de fortalecimiento de su recién nacionalizada industria del gas y petróleo, y en los programas sociales que se desarrollaron en ese país. 

Largas conversaciones, donde fui testigo de excepción, entre Evo, el presidente Chávez y el Comandante Fidel, me permitió conocer en Evo a un hombre profundamente honesto, de convicciones, un revolucionario a carta cabal, socialista, de una calidad humana extraordinaria, a veces, rayando en la ingenuidad. 

Evo es un leal y genuino representante de las mayorías humildes, campesinas, indígenas de su país, estaba decidido a restablecer los derechos y la justicia a favor de su pueblo que, durante siglos, ha sido humillado, maltratado y despojado por una élite blanca, criolla, que era dueña del país y que mantuvo a Bolivia como el más pobre del hemisferio occidental.

Por otra parte, el vicepresidente García Linera, aunque de un talante personal distinto, fue un factor fundamental del éxito del gobierno de Evo. Igualmente, un hombre de convicciones y revolucionario, íntegro, trabajó siempre de manera incansable para lograr una gestión eficaz en la conquista de la soberanía y la construcción del socialismo. 

Evo cumplió su palabra empeñada al pueblo boliviano, lo hizo, y lo hizo con valor. Impulsó profundas transformaciones políticas, económicas y sociales en el país, a pesar de la oposición virulenta de la derecha, las élites privilegiadas, dueñas hasta ese momento de Bolivia, de sus recursos naturales, de los hidrocarburos, de los servicios públicos, del agua, del transporte, del campo, de todo.

Los éxitos del gobierno de Evo Morales son innegables, irrefutables, muestran la eficacia del socialismo para lograr el desarrollo de nuestros países con justicia social, un buen ejemplo, veamos: 

En términos de soberanía, nacionalizó con éxito la industria de los hidrocarburos, el petróleo y el gas, la Estatal YPFB asumió el control de las operaciones, renegociaron los contratos de suministro de gas con Brasil y Argentina para ponerlos en términos de justicia para Bolivia. Desarrolló grandes proyectos de industrialización del gas, la petroquímica, grandes centrales termoeléctricas.

Según la CELAG, en su “Radiografía de la situación económica boliviana”:

  • “El Producto Interno Bruto de Bolivia (PIB) creció durante el gobierno de Evo Morales (período 2006-2017), un 78% a precios constantes, un 27% más que los doce años previos”.
  • La inversión pública alcanzó 12,6% del PIB del país, frente a otros países vecinos como Brasil o Chile, que solo alcanzan niveles del 1,6% y el 2,6%, respectivamente.
  • La Inversión Extranjera Directa (IED) neta recibida, que pasó de 335 millones de dólares en el año 2016, a 725 millones en el año 2017, un incremento del 116%.
  • Las reservas internacionales alcanzan un 27% del PIB, otorgando robustez al sistema y mostrando una baja vulnerabilidad externa. A nivel regional, Bolivia sigue ocupando el primer lugar en cuanto al peso de las reservas internacionales con respecto al PIB, lo que le permite contar con una importante fuente de recursos en caso de necesidades de financiación, y la plena capacidad de controlar la política cambiaria que le ha llevado a tener, prácticamente, una nula variación con el tipo de cambio respecto al dólar estadounidense.
  • Uno de los mayores éxitos de la economía boliviana ha sido, sin duda, el proceso de desdolarización, permitiéndole alcanzar la soberanía de la política monetaria debido a la estabilidad y buenos resultados macroeconómicos de los últimos años. 

En cuanto a los índices sociales, el éxito es también contundente.

  • En la población económicamente activa, las tasas de desocupación en Bolivia son solo del 2,9% para los hombres y del 4,1% para las mujeres.
  • El salario mínimo aumentó de 500 a 2.060 Bolivianos, un aumento de 312%. Si se considera una inflación anual de 5,5%, se evidencia un fuerte crecimiento del salario real. El índice de salario nominal aumentó un 85%, durante el período analizado, para el total de los grupos ocupacionales.
  • La pobreza extrema en Bolivia, gran flagelo que afectaba casi a la mitad de la población finalizando el siglo XX, ha pasado de afectar al 45,2% de la población en el año 2000 al 17,1% en el año 2017. Estos números llevan a Bolivia a ser el país de la región suramericana que más ha reducido la pobreza extrema en el período 2005-2016.

¿Qué reflexiones o enseñanzas nos deja este triste episodio del derrocamiento de Evo?

América Latina arrastra como un peso que no la deja avanzar, que la mantiene en el fondo y a la cola del mundo: la prepotencia y el poder de las élites económicas de nuestros propios países.

Éstas han demostrado, en múltiples ocasiones, en trágicos episodios que han plagado nuestro hemisferio de violencia y golpes de Estado, que son élites atrasadas políticamente, violentas, que no están dispuestas a ceder en sus privilegios, así los mismos signifiquen mantener a todo el país en el atraso.

Las élites económicas de nuestra región han construido grandes fortunas basadas en el despojo de nuestros países, de la riqueza social, de la explotación de la mano de obra sub pagada, casi esclava, actúan como agentes de intereses transnacionales.

Pueden haber en la región gobiernos exitosos y que traigan avances a nuestros países, como el de Evo Morales, pero sin embargo, a las élites no les importa, prefieren acabarlo todo, retroceder, mantener sus groseros privilegios. 

No se puede construir el socialismo, o al menos una sociedad progresista, si los avances económicos no van acompañados en avances en la conciencia de los ciudadanos, sobre todo, en el seno de las clases medias. Si las relaciones de producción, los valores y objetivos hegemónicos en la sociedad apuntan hacia el egoísmo, se están apuntalando siempre salidas individuales, fraccionadores de la unidad nacional, de los intereses colectivos

La solidaridad, el bien común, el deber social, el vivir bien de todos los ciudadanos, la democracia participativa y protagónica, el empoderamiento del pueblo en las decisiones y estructuras de poder, el trabajo y la honestidad, deben ser valores asumidos por toda la sociedad.

Se debe resolver el dilema de cómo sostener la continuidad de un proceso de transformaciones políticas, económicas y sociales, más allá de un liderazgo, de una persona. Cómo fortalecer una institucionalidad, los poderes del Estado, que actúen apegados a la Constitución, a las leyes, al interés general, que preserve las conquistas políticas, sociales y económicas del país, para no ser tan vulnerables a la acción violenta de las élites, de la derecha.

El rol de las FFAA es fundamental. Deben ser el factor decisivo para preservar las conquistas sociales, la Constitución, no plegarse a los intereses de las élites, que su espada solo sea empuñada para defender la soberanía del pueblo y las garantías sociales.

Hay que empoderar al pueblo, construir una poderosa vanguardia, con un fuerte tejido de movimientos políticos y sociales, con la diversidad de posiciones y posturas necesarias para que su crítica y acción hagan avanzar al país, que proteja a toda la sociedad de la acción violenta y desestabilizadora de cualquier grupo de poder. 

Una democracia plena, protagónica, participativa, que abra el debate de las ideas, que cuide el rumbo del proceso transformador, que se retroalimente de la crítica, de las necesidades espirituales de toda la sociedad, que no sea sectaria, donde exista la rendición de cuentas. Este elemento, profundamente democrático, lejos de debilitar, fortalece en el tiempo la conciencia de toda la sociedad.

Desarrollar una fuerte conciencia nacional, soberana, integrada al resto de la región, en una comunión de intereses y objetivos que nos protejan frente a la injerencia extranjera y la acción desestabilizadora de los grandes intereses transnacionales, que nos movamos en nuestra propia estrategia y no subordinados a poder extranjero alguno. Mirar hacia el Sur, no a la OEA. Nuestra referencia, nuestras instancias naturales, propias, son la UNASUR, la CELAC.

Evo, cada 11, tiene su 13

Aunque un sentimiento de pesar y tristeza recorre a nuestra región, por lo sucedido en Bolivia, confío plenamente en que el liderazgo de Evo sabrá accionar de manera decidida para restablecer el orden constitucional y la democracia en Bolivia.

De nuestra propia experiencia cuando sufrimos el golpe de Estado el 11 de abril de 2002, y luego de la desesperanza y la confusión inicial, nuestro pueblo supo reaccionar de forma masiva, nuestros oficiales patriotas cumplieron con su responsabilidad y lograron restablecer el orden constitucional. En aquel momento, obtuvimos una importante enseñanza: cuando un pueblo tiene esperanza, pasión y un liderazgo, es capaz de sobreponerse a la acción violenta de las élites. Todo tiene su tiempo, sus circunstancias, sus características propias. 

El pueblo boliviano, los pueblos originarios, las mayorías humildes del país, saldrán del aturdimiento provocado por la violencia fascista. El Alto y Cochabamba marcarán el rumbo, los campesinos, los cocaleros, los movimientos sociales, sabrán responder al fascismo.

Evo y la dirigencia popular boliviana necesitan preservarse de la violencia fascista, que el repliegue táctico, permita reorganizar al movimiento popular y retomar la movilización en todo el país, exigir el cese de la violencia, restablecer el orden constitucional y retomar la posibilidad de mantener al pueblo boliviano en el camino de la esperanza, del vivir bien, del camino trazado por nuestro hermano, el presidente Evo Morales ¡Venceremos! 

We Stand Against the Coup in Bolivia (statement from Noam Chomsky and Vijay Prashad)

In Bolivia, a coup d’état is brewing against the elected government led by Evo Morales. Sections of the armed forces – including the police – have openly indicated that they are willing to allow fascistic militia groups to attack the presidential palace in La Paz. This is a very serious situation.

Evo Morales has invited the four major parties to sit down and talk about the way forward for Bolivian democracy. He has asked for the creation of a dialogue to prevent a return to the days of military dictatorships and the rule of the oligarchy. Morales has called upon the United Nations, the Organization for American States, the Vatican and others to assist in a path away from the coup.

The coup is driven by the Bolivian oligarchy, who are angered by the fourth election loss by their parties to the Movement for Socialism. The oligarchy is fully supported by the United States government, which has long been eager to remove Morales and his movement from power. For over a decade, the US embassy’s Center of Operations in La Paz has articulated the fact that it has two plans – Plan A, the coup; Plan B, assassination of Morales. This is a serious breach of the UN Charter and of all international obligations.

We stand against the coup, and with the Bolivian people. We hope that they will be able to withstand what is thrown against them in the days to come.

El Mundo Con Evo. So are we.

9 November 2019

Nos oponemos al golpe (Declaración de Noam Chomsky y Vijay Prashad)

Declaración de Noam Chomsky y Vijay Prashad

En Bolivia se está gestando un golpe de Estado contra el gobierno electo liderado por Evo Morales. Sectores de la policía han dicho abiertamente que están dispuestos a permitir que grupos de milicias fascistas ataquen el palacio presidencial en La Paz. La situación es muy grave.

Evo Morales ha invitado a los cuatro principales partidos a sentarse y conversar sobre el camino a seguir para la democracia boliviana. Ha pedido el establecimiento de un diálogo para evitar el regreso de los días de las dictaduras militares y los gobiernos oligárquicos. Morales ha hecho un llamado a las Naciones Unidas, a la Organización de los Estados Americanos (OEA), al Vaticano y a otros más para que contribuyan a encontrar el camino para alejarse del golpe.

El golpe es promovido por la oligarquía boliviana que está enojada por la cuarta elección que sus partidos pierden frente el Movimiento al Socialismo. La oligarquía cuenta con el total apoyo del gobierno de los Estados Unidos que desde hace mucho tiempo está ansioso por expulsar a Evo Morales y a su movimiento del poder. Por más de una década, el Centro de Operaciones de la embajada de Estados Unidos en La Paz ha expresado que tiene dos planes: el Plan A, un golpe de estado y el Plan B, el asesinato de Morales. Se trata de una grave violación de la Carta de las Naciones Unidas y de todas las obligaciones internacionales.

Estamos con el pueblo boliviano y nos oponemos al golpe. Esperamos que sean capaces de resistir todo lo que se les viene encima los próximos días.

El mundo con Evo. Nosotros también.

9 de noviembre de 2019