El ex ministro de Petróleo (2002-2013) y ex presidente de Petróleos de Venezuela (Pdvsa) (2004-2013) Rafael Darío Ramírez Carreño (Pampán, estado Trujillo, 4 de agosto de 1963) ubica como un elemento clave que permite explicar la actual crisis del combustible del país, la designación a finales de 2014 del sobrino de Cilia Flores, Erick Malpica Flores, como vicepresidente de Finanzas, quien –asegura– “desvió los recursos destinados a la inversión, costos y gastos para las refinerías”.
Defiende su gestión. Dice que durante el período en el que estuvo a cargo de la industria petrolera “jamás faltó la gasolina”. Señala que el jefe del régimen, Nicolás Maduro, lo que está haciendo es favorecer a los grupos económicos de su entorno e identifica a Wilmer Ruperti y Alex Saab como parte del mismo.
Considera que el ex embajador de España en Venezuela, Raúl Morodo, señalado por casos de corrupción “es un hombre honorable”. Refiere que el expresidente del gobierno español, José Luis Rodríguez Zapatero intercedió por capitales españoles a los que luego se les asignó un campo en la Faja Petrolífera del Orinoco. Ramírez asegura que no tiene proceso judicial abierto en ninguna parte del mundo, solo en Venezuela, donde acota que los poderes ejecutan los designios de Miraflores.
Declina pronunciarse sobre presuntos casos de corrupción en los que aparecen algunos de sus colaboradores, como Nervis Villalobos y Rafael Reiter, y más bien espera “que la justicia se pronuncie”. Reta a Maduro a permitir que su primo Diego Salazar –encarcelado en Venezuela– hable y se defienda y además anuncia que prepara desde su exilio un libro donde narrará situaciones “que nadie se atreve a comentar”.
La industria petrolera
–¿Cuál es su opinión sobre las medidas tomadas por Maduro en materia de combustible y cómo un país petrolero como Venezuela llegó al extremo de no tener gasolina?
–Tengo más de cinco años alertando de las malas decisiones que se estaban tomando desde Pdvsa. Nadie me creía, hicieron una campaña feroz en mi contra, luego me exiliaron, pero al final lamentablemente lo que sucedió es que Pdvsa está colapsada y estos buques iraníes que Maduro muestra como un éxito, realmente evidencian un fracaso rotundo de lo que ha sido su gestión frente a Pdvsa. Durante mi gestión de 10 años frente a Pdvsa jamás faltó la gasolina. Nosotros tenemos en el país un sistema de refinación nacional con una capacidad de 1,3 millones de barriles diarios. Los más importantes: el CRP (Complejo Refinador Paraguaná) 955 mil, El Palito 140 mil, Puerto La Cruz 187 mil, y hasta el año 2013 que fue el último año de cierre, con números auditados, producíamos 1.127.000 barriles diarios de combustible. En 2014 nosotros logramos atender 660.000 barriles diarios y exportamos 406.000 barriles. ¿Cómo Maduro destruyó esa capacidad de refinación y pasamos de 1 millón a producir apenas 135.000 barriles? Porque lo primero que hizo fue colocar 7 juntas directivas, que no estaban preparadas para el negocio. Fue crucial y muy grave cuando pusieron a Erick Malpica Flores como vicepresidente de Finanzas, porque comenzó a desviar los recursos indispensables para la inversión y costos y gastos de las refinerías.
–¿Previamente, cuánto se había invertido en esa materia?
–En 10 años nosotros invertimos 28.000 millones de dólares para las refinerías, cada año había un presupuesto. Solo en 2013 se invirtieron 1.535 millones de dólares en costos y gastos y para desarrollo 2.681 millones de dólares. Pero tal como dijo Eulogio Del Pino –exministro de Petróleo– antes que lo metieran preso, pusieron (en la petrolera) una vicepresidenta que era una almiranta, y no le dieron recursos a las refinerías. Una refinería no es algo que puedes dejar que funcione mal como un carro, es más como un avión que si una pieza falla el avión se cae. Si ves la serie de caída de producción de combustibles, mientras en 2013 cerramos con 1.127.000 barriles día de combustible, incluyendo gasolina, diésel, fuel oil y lubricantes, en 2016 era de 716.000, en 2017 cuando entra Manuel Quevedo (a la presidencia de Pdvsa) 597.000 y en 2020 fue 135.000, apenas 10% de producción de la capacidad de refinación. Pero en la junta directiva no había dolientes, porque el jefe de comercio y suministros era el que le llevaba el Twitter a Tarek El Aissami, el gerente de producción era un arquitecto, en refinación pusieron a un exoficial del 4 de febrero y cuando llenaron a Pdvsa de guardias nacionales eso fue el acabose. Ellos están importando gasolina desde 2018 y 2019 a través del señor Ruperti, pero ahora eso colapsó. No pueden y por eso tiene que recurrir a los iraníes.
–Usted habla de desviaciones de recursos por el señor Malpica Flores. ¿De cuánto dinero estamos hablando y a dónde fueron destinados esos recursos?
–Fue una desviación de recursos a otro uso por parte del Ejecutivo. Pdvsa tiene un plan operativo donde todos los negocios de la empresa te dicen cuánto necesitan y tienen que cumplir con ese presupuesto. ¿Cuánto desvió este señor? Eso tendrá que decirlo Eulogio Del Pino, pero evidentemente todos los negocios se quedaron sin los recursos indicados. Producción tuvo que parar y hoy en día la producción es apenas de 622.000 barriles. Nosotros la dejamos en 3 millones. Igual pasa con la refinación y con el gas. Lo mismo que está pasando con la gasolina va pasar con el gas. Ahora es cuando comienza a verse el estado de la pésima gestión de Maduro en Pdvsa. Por eso es que yo digo que los presos de Maduro –relacionados a Pdvsa- se quedarán presos, porque ellos son los testigos, Esa pregunta que me estás haciendo es muy buena hacérsela a Eulogio Del Pino, a Jesús Luongo (ex jefe de Refinación), a todos los muchachos que están secuestrados allí y antes que se mueran, porque dejaron que se muriera Nelson Martínez (expresidente de Pdvsa), que sabía todo.
–¿La quiebra de Pdvsa es negligencia o hay una intencionalidad para generar negocios a particulares? Porque Maduro dice que una parte de la gasolina –la que se paga en dólares– va a ser manejada por unos empresarios que están trayendo la gasolina por su propia cuenta.
–Yo lo denuncié el 1 de mayo con un documento que me hicieron llegar unos trabajadores sobre el plan de reestructuración. Allí está dibujada la entrega de Pdvsa: la privatización. Algo que ni siquiera se atrevió a hacer la IV República. Esta gente que tanto critica a los gobiernos de la IV República y ha hecho cosas peores en términos petroleros. Esto es mucho peor que la apertura petrolera. Cuando se firmó el decreto 3.068 se le dio luz verde a Quevedo para que hiciera lo que tuviera que hacer para incrementar la producción petrolera. Lo primero que hizo fue firmar los contratos de servicios petroleros que se les asignó a los grupos económicos del madurismo. Tú no viste ninguna licitación. Se los dieron y ya. La producción lo que ha hecho es caer y los taladros se los entregaron a esas empresas. Te pones a preguntar dónde están los buques de Pdvsa, porque hasta que y llevé Pdvsa manejamos 70% de nuestras exportaciones con nuestros propios buques. ¿Qué hicieron con esos buques? Ahora dicen que es por las sanciones, pero Irán también está sancionado y nos envía gasolina. Cuba está sancionada y no tiene problemas de gasolina. Cuando Maduro dice que va a entregar 200 bombas de combustible a los privados, tú te preguntas ¿Quiénes son esos privados? ¿Quién los escogió? ¿Qué inversión hicieron? ¿Qué van a traer gasolina? Eso no es verdad. No están trayendo. Ningún privado se atreve a traer gasolina por las sanciones norteamericanas. Por eso solo lo hace Irán, que están resteados y tienen un juego geopolítico. Maduro lo que hace es ceder a los privados. La gente no recuerda que lo que hoy en día son bodegones eran Abastos Bicentenario. ¿A cuenta de qué Maduro cedió esos activos del Estado al grupo de Alex Saab? Además, esto que está haciendo con la gasolina viola la ley vigente de reordenamiento del mercado interno, que emitimos en el año 2008 y al menos tendría que derogarla. Pero Maduro no quiere aparecer derogando las leyes de Chávez, porque dice que es hijo de Chávez. Pero este gobierno no es chavista, ni es bolivariano y si Chávez estuviera vivo ya hubiera metido preso a Maduro.
–¿Cuáles son los grupos económicos del madurismo?
–Tú los ves. Alex Saab es el más notable, pero ahí está también este señor Wilmer Ruperti, que se ha convertido en el jefe de suministros. Es gente que se está aprovechando. Es una imagen como la del gobierno de Boris Yeltsin, quien agarró todos los activos del Estado y los privatizó a favor de sus amigos, e hicieron grandes fortunas en la Rusia post soviética, solo que a estos tienes que sumarle la rapiña y la incapacidad, porque no son capaces de manejar nada y todo lo que tocan lo secan.
–¿El negocio con los iraníes es viable en el tiempo? El diputado José Guerra dice que la gasolina que trajeron alcanza solo para dos semanas.
–Esto es muy limitado. Yo calculé y esto da para apenas 9 o 12 días del consumo interno que hay ahorita, que son apenas 120 mil barriles. El consumo durante nuestro período llegó a 633 mil barriles día de combustible, porque había actividad económica y crecimiento del PIB, ahora con una contracción de la actividad económica, que no tiene nada que ver con el coronavirus, porque empezó desde 2015, no hay actividad. Pero, ¿Después de 10 días qué van a hacer? ¿Van a traer más barcos? Lo pueden hacer, pero ¿cómo lo pagan? ¿Van a seguir haciéndolo con el oro del Arco Minero? Sin rendirle cuentas a nadie. Están manejando esto como una hacienda. Además, hay una demanda deprimida: mucha gente que se resignó a no echar gasolina, pero cuando dices que hay gasolina todo el mundo se vuelva a tratar de surtirse y no encuentra. Lo que va a pasar es que ese esquema del monto subsidiado y el monto en dólares van a convertir a quien no era bachaquero en bachaquero. Todo el mundo está haciendo negocios con la gasolina, es una lástima que se esté involucrado a las Fuerzas Armadas y al Ejército. Por otra lado, hoy en día el salario mínimo es de 2 dólares, el más bajo de todo el hemisferio y quieren vender la gasolina en 0,5 $ el litro Por eso digo que es un paquetazo peor que el que ellos critican, peor que lo de (Mauricio) Macri (expresidente de Argentina) y lo de Carlos Andrés (Pérez) quedó en pañales, respecto a lo que Maduro está haciendo con la gasolina.
–¿Pueden los iraníes ayudar a arrancar las refinerías que no están funcionando?
–Nuestras refinerías son muy antiguas, pero no obsoletas. Cuando fueron diseñadas hace 67 años en promedio, como el CRP y El Palito, fueron hechas con paquete tecnológico norteamericano. El CRP es una de las refinerías más grandes del mundo. Los iraníes no tienen una refinería como esa. Tendrán que ver cómo se las arreglan con los paquetes tecnológicos, porque desde los años 70 no tienen acceso a estos paquetes y tendrán que ver cómo hacen la gestión operacional, porque hay que verle la cara a manejar una refinería de un millón de barriles diarios. Además, eso no es una solidaridad entre países que se ayudan a cambio de nada, los iraníes cobraron la gasolina y sus servicios tecnológicos lo van a cobrar y Maduro lo que quiere es que alguien se haga a cargo, violando la Ley de Hidrocarburos que establece en su artículo 10 que nada de lo existente en Pdvsa puede ser privatizado. Puedes crear nuevas empresas mixtas, pero los activos del Estado son del Estado. En el año 2013 Pdvsa era y seguramente lo es todavía, una empresa de 285.000 millones de dólares en activos, esto es un gran negocio, por lo que hay mucha gente que está tratando de pescar en río revuelto.
–Algunos analistas señalan que el origen de la actual situación de Pdvsa tiene que ver con la salida del personal calificado de la industria con motivo del paro petrolero de 2003.
–Hay que poner las cosas en contexto. La gente que salió de la industria fue por el sabotaje petrolero. Allí nosotros perdimos 17.000 millones de dólares y salieron 19.000 personas, pero es que ningún gobierno tolera eso. Fíjate que no hay ningún preso. Recuerdo bien, yo estaba de ministro cuando Alí Rodríguez era presidente Pdvsa, en ese momento hubo una huelga en los puertos de EE UU con (George W.) Bush y se los llevaron presos a todos. En ningún país del mundo los trabajadores porque tienen un desacuerdo político van a parar las refinerías, van a parar la producción y se tuvo que actuar de esa manera. No solo fue que la pararon, fue que la sabotearon. Yo estuve en la refinería de Puerto La Cruz y en el CRP. Al CRP la dañaron. Tuvimos que ir unidad por unidad antes de ponerla en funcionamiento, y pusieron como bomba caza bobos, que si tú prendías, estaban los instrumentos mal configurados y podía haber un accidente. Se tuvo que imponer el imperio de la ley porque veníamos de un golpe de Estado. En enero de 2003 estábamos produciendo solo 23.000 barriles diarios de petróleo y no había gasolina, pero aquello fue por razones políticas. Se quedaron en la industria 20.000 trabajadores, porque también hay que considerar los que se quedaron y no cometimos el error de meter en la junta directiva a gente que no supiera. No metimos a ningún político ni a ningún militar.
–Otro de los cuestionamientos es que la crisis de Pdvsa tiene que ver cuando al final del gobierno de Chávez se incrementa considerablemente el gasto público, y entonces se usan los recursos de Pdvsa para actividades no petroleras.
–Bueno sí. El país fue incrementando sus inversiones, sus gastos, pero el presupuesto de Pdvsa nunca se tocaba. Allí están los informes auditados por la KPMG e invito a que se revisen porque están en la web, los miles de de millones que se invertían en producción y refinación y Chávez no se metía con eso, porque sabía que no se podía paralizar la industria petrolera. Todo lo que se hizo en términos de desarrollo social y términos fiscales, era lo que estaba en la ley. Se pagaba la regalía, los impuestos, se crearon los fondos, pero nunca tocamos los fondos de Pdvsa.
–Ricardo Haussmann en una entrevista reciente dijo que “hace varios años, alrededor de 2012, hicimos unos cálculos y Venezuela estaba proveyendo 12% del Producto Interno Bruto de Cuba”. Se ha asegurado que Venezuela entrega parte de su gasolina al gobierno cubano. ¿Qué nos puede decir al respecto?
–Yo estuve al frente de la comisión mixta responsable de los programas sociales que se compensaban con petróleo. Para nosotros eso funcionó muy bien. Se levantó un sistema de salud como Barrio Adentro, o como las misiones Ribas, Robinson, estaba muy bien compensado con el petróleo. Eso que nosotros hicimos después lo hizo Qatar, Paquistán y Brasil, lo que pasa es que en Venezuela la crispación política es muy fuerte. Actualmente no sé si se está enviando gasolina a Cuba, pero lo que sí sé es que en Cuba teníamos una empresa mixta, una refinería con los cubanos, en la cual nosotros teníamos 49% y Maduro se las entregó a los cubanos. El punto de cuenta lo firmó Delcy Rodríguez como canciller, y argumentaba que nosotros le debíamos plata a Cuba, imagínate eso. Es muy mal porque Maduro ha dispuesto de activos del Estado venezolano que quizá nos estarían ayudando en estos momentos, porque muy bien podría venir gasolina de nuestra refinería en Cienfuegos, o nuestra refinería en Jamaica o República Dominicana, para no hablar de Citgo que está confiscada, y como siempre dijimos, ese era un rehén que estaba en territorio de los EE UU, y ahora no se cuenta con ello.
Casos de corrupción
–Hay unos casos de supuesta corrupción en las que estarían involucrados colaboradores suyos. Nos referimos a Nervis Villalobos, Rafael Reiter y Diego Salazar ¿Tienen base los señalamientos en su contra?
–Entiendo que tanto Reiter como Nervis Villalobos están en juicio. No me aventuro a asomar alguna opinión en torno a un caso que se está ventilando en tribunales. Esperemos a ver qué determina la justicia. En el caso de Diego Salazar ni siquiera tiene juicio, está secuestrado ahí de una manera muy cruel y se han ensañado contra él solo porque es mi primo, y no tiene derecho a la defensa ni a nada, junto a 100 trabajadores de Pdvsa que no tiene ningún tipo de derecho. Yo le reto al gobierno que le haga un juicio, por qué no lo dejan hablar, porque no lo dejan defenderse. Respecto a mí no hay nada: me atacan, me ofenden, pero no han presentado nada en contra mía. Si Maduro tuviera aunque sea un papelito en contra mía hiciera una cadena nacional, pero no lo va a conseguir. No hay tal caso, no tengo problemas con la justicia internacional. Quienes tienen muchos problemas son ellos: Maduro y su círculo íntimo, que no pueden poner un pie fuera del país. Yo se lo dejo al tiempo, decían de Pdvsa y mira los resultado de la gestión de Maduro, que me está dando lamentablemente la razón. De mí han dicho de todo, prácticamente soy responsable hasta de la muerte de Bolívar, pero el tiempo va desenmascarar que esta gente usó el fake news y al fiscal ese que tienen que hace lo que Maduro quiere, para perseguir con mucha saña a los chavistas. Yo denuncié muy temprano lo que estaba pasando. Se lo dije a él mismo (Maduro) en 2014. Le di 12 documentos donde decía el desastre que iba a pasar si él no tomaba la decisión. Se lo dije al Congreso del PSUV, hasta que comencé a escribir, entonces se molestó muchísimo y tuve que renunciar. Entonces hablé con Rodríguez Torres y me dijo, me voy a lanzar a la candidatura y yo le dije: Yo también. Él estaba en Venezuela y lo metieron preso ¿Por qué no lo dejan salir? Ese sí sabe y maneja información sobre Maduro.
–En algún momento usted ha señalado al expresidente del gobierno de España de ser una especie de lobista de empresas petroleras de España. ¿Puede darnos más detalles?
–Esa información me la dio Delcy Rodríguez cuando ella era canciller. Que él estaba intercediendo por capitales españoles, y le ponemos comillas, para “ayudar al país”. Al final se aprobó una empresa que creo que se llama Petrosur en la Faja Petrolífera del Orinoco donde se les dio el bloque Junín 10 a un grupo de capitales españoles, donde estaba el grupo Cortina, vinculado al PP (Partido Popular) y a Repsol. Ellos registraron una firma en Malta, una empresa de maletín sin ningún tipo de experiencia y le dieron uno de los mejores campos de la Faja Petrolífera del Orinoco, entonces, no sé si Zapatero –actualmente- representa esos capitales, o los representaba, pero a mí las cosas me hacen clic. Tendrá que responder Zapatero.
–El exembajador español Raúl Morodo, también ha sido mencionado en casos de supuesta corrupción relacionado con Pdvsa ¿Maneja alguna información?
–He visto lo que sale en la prensa española, pero me da la impresión que es más un tema contra Morodo por ser una figura relevante del Partido Socialista (Obrero Español), es un tema interno de España. Yo conozco a Morodo cuando fue embajador y creo que es un hombre honorable, muy importante en un periodo de transición en España y espero que salga bien librado.
Su vida personal
–¿Cómo está su situación personal?
–Estar exiliado de tu patria es lo más duro que te puede suceder, porque yo soy de una familia de profundas raíces venezolanas, y ver desde la distancia como destruyen al país y el esfuerzo de 12 años de trabajo y en nombre de Chávez, no deja de ser decepcionante, frustrante, pero a la vez un estímulo para seguir en la lucha. Maduro se mantiene en el poder por el miedo, por el chantaje. Mucha gente prefiere guardar silencio, yo no. Desde 2017 le dije que no quería nada que ver con lo que estaban haciendo en el país y que lo iba a denunciar, porque son una partida de bandidos que aprovechándose del nombre de Chávez han hecho con nuestro país lo que quieren. Yo desde el punto de vista legal no tengo problemas en ningún sitio del mundo. El único problema que tengo es con el gobierno venezolano que usa la Fiscalía y los poderes a su antojo y eso a mí no me preocupa. Yo sigo trabajando en lo único que he hecho en mi vida, que es el sector petrolero. Tengo 34 años en el sector petrolero, 10 años CEO de Pdvsa, 12 años ministro de Petróleo, así que algo se y la gente me busca y trabajo. Escribo todos los días, tengo mi boletín. Estoy escribiendo un libro que va a ser muy importante para el país, de toda mi experiencia en el gobierno del presidente Chávez, sobre lo que creo que nadie ese atreve a decir. El libro está muy avanzado
–¿Algún hecho del que se arrepienta?
–Sí: De haber apoyado a Maduro. Creíamos que lo iba a hacer bien y que sería consecuente con el programa de gobierno de 2012 y resultó un traidor más.